El nuevo trabajo de los alicantinos Space Rockers PYRAMIDAL, titulado así mismo, Pyramidal, consolida a la banda en lo que para mi gusto es su trabajo más completo y personal. Una banda que lejos de estancarse, han ido evolucionando y ganando en profesionalidad convirtiendo cada trabajo que editan en un puto clásico.
Difícil se me haría ya separar los estupendos arreglos de Arantxa Marín a los saxos que han dotado al corpus pyramidale de un empaque que si bien no imita para nada a HAWKWIND, si que los adopta en espíritu. Pero ojo, PYRAMIDAL son mucho más. Los desarrollos instrumentales desérticos, lo abigarrado y barroco de algunas melodías que coquetean con el Progresivo Sinfónico y el uso de voces en partes puntuales y bien medidas hablan de una banda que sabe lo que quiere y lo más importante, cómo lo quiere.
El cuarteto inamovible de Miguel Angel Sanz, Óscar Soler, Miguel Rodes y Lluis Más han grabado en la "Facultad de Bellas Artes-UMH" junto a Daniel Montiel para luego mezclar en los clásicos Oriental Desert. La masterización eso sí, obra de Fabian Tormin en Hamburgo (Plätlin Mastering). Excelente fotografía de portada de MARA B. STONES que retoca para el diseño VON KLANG tanto para la edición en CD de SURNIA RECORDS como para la ya clásica edición splatter vinilo de LAY BARE RECORDINGS que es una jodida preciosidad (atrás quedaron los tiempos de KRAUTED MIND). Por cierto, César Tenorio añade efectos y sintes a lo largo del disco.
Entre los trabajos de HÍBRIDO, ATAVISMO, MELANGE o MOHAMA SAZ, y esta barbaridad de PYRAMIDAL, a uno le cuesta no pensar que estamos ante un florecimiento alucinante del Prog y Psych íbero. Lejos de copiar a otros grupos, se trata de bandas con una identidad propia y bagaje muy marcado y sin temor a equivocarme creo que están escribiendo historia. Pero dejemos sonar la música...
Abre "Visions of an Astral Journey" con soundscapes ambientales. Un bajo y una guitarra cargada de wah wah se van trenzando a ritmo de Jazz Rock con ese saxo tan maravilloso de Arantxa. No sé si os habéis dado cuenta, pero el saxofón y lo que ha dado al Progresivo o al Post Punk son dignos de un estudio académico. No digo que esto suene a Canterbury, pero poco le falta. PYRAMIDAL han ido ganando en calidad instrumental y lo que antes decían con el triple de tiempo ahora son capaces de sintetizarlo en unos pocos cambios de ritmo... así se suceden lánguidos pasajes pseudo Noir con otros más abstractos y espaciales donde destaca una maravillosa forma de acometer la melodía por parte de las guitarras.
El cambio de ritmo a mitad de tema es crudo y llega a los niveles de bandas que editan en CUNEIFORM RECORDS. Qué se yo... cosas de Avant Prog como THE MUFFINS, DOCTOR NERVE y en definitiva esa vuelta de tuerca que resulta de metalizar a SOFT MACHINE (salvando las diferencias, claro). Culpa de muchas de estas reflexiones la tiene el saxo, por supuesto, además de que nunca he entendido bien qué diablos significa ese saco vacuo del Space Rock que funciona como comodín para reseñadores torpes que buscan la vía rápida.
Sin embargo, "Creatures of the Ancient World" sí que se mete de lleno en el cosmos orientalizante que usa a Gong como testigo de cargo. Si coges a los monolíticos YURI GAGARIN y les añades pizcas de Oriente Medio podría dar como resultado algo así. MARS RED SKY también podrían ser un buen punto de comparación sobre todo por la base rítmica pero para qué diablos irse tan lejos cuando MOHAMA SAZ son nuestros SECRET CHIEFS 3.
El fastuoso violín de Judti Aliaga tiene la culpa de estas comparaciones. Mantras vocales suenan como volutas salidas de un pebetero tóxico que se alimenta de dádivas secretas. Pero claro, qué sería del universo sin los arranques sucios de HAWKWIND... qué sería del rock espacial sin esas guitarras fuzzeras en diálogo perpetuo con otras civilizaciones.
Diablos!!... qué sería de las pirámides si no existiesen los ángulos?.
Tras la tormenta, "Unconscious Oscillations" cierra la Cara A de forma alucinante. Saxos, efectos de teclados, una melodía que parece ir al revés y casi casi que uno tiene la sensación de que con un poco más de abstracción se llegaría al Free Jazz aunque lo que acaba primando es ese ambiente eléctrico y claustrofóbico (de jungla) de MILES DAVIS en clave más rockera.
La Cara B se abre con "Digital Madness". La guitarra casi desnuda salvo mínimas percusiones y toques de bajo y teclados en los primeros segundos pronto dan paso a una descomunal cabalgada espacial marca de la casa. Destacar otra vez unas voces simples, breves y muy efectivas tal y como me gustan. La base rítmica en este corte tiene una fuerza que asusta y sin virtuosismos inútiles se crea un muro sobrio que hace imposible que uno no se acuerde del Jazz Rock Alemán a la XHOL CARAVAN, KRAAN, EMBRYO y cosas así, pero con más fuerza hard rockera si cabe; una reactualización de todo ese sonido sería más acertado creo yo.
Para colmo, la descomunal "Alussa Infinity" de 15 minutos de duración extiende la paleta expresiva a todo lo que se os pueda ocurrir. Desde el Space Rock puro y duro a los oscuros ambientes de KING CRIMSON, para pasar por ambientes Doom que ponen los vellos de punta (como una versión más pétrea si cabe de BLACK SABBATH, a los que cuesta no poner en la palestra con esos desquiciados y alucinógenos devaneos de mitad del tema). Ojito al arranque pseudo Thrashero; me pellizco varias veces el pezón derecho para ver si no se trata de los CELTIC FROST o algo.
De punta se me ponen los vellos con el despliegue de Space Folk con el que se finiquita otra obra maestra de los alicantinos, y ya van unas cuantas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario