Que dos de las bandas más interesantes del país se alíen en un Split es motivo de celebración. Desde las grandiosas y herméticas tierras del País Vasco para BALLARD y del Axis Mundi Íbero de Madrid para HIPOXIA, ambos proyectos son habituales de este blog por derecho propio; capaces de solidificar la oscuridad en algo físico y amenazador, voy a resumir bastante la Bio porque en sí de todo ello ya he tratado en reseñas anteriores. Hipoxia debutan con Doomrehearsal (solo digital y creo que algún CDr, 2010) para poco después editar el homónimo Hipoxia en Le Crépuscule du Soir Productions (2012). Más o menos por esas fechas doy con ellos gracias a un viejo foro que ya no existe y me hago con dicho trabajo, quedándome absolutamente extasiado por su forma envolvente de entender el Doom Death. Tan solo un año después Féretro Records / Discos Macarras hacen lo propio con un alucinante Split con Gangrened (reseña aquí). Pasa algo de tiempo (2016) para que la oscura American Line Productions (México) saque un monolito tremebundo llamado Si Devs Esset Occidendvs Erit -Monvmentvm Ab Khaos I donde se sigue ahondando en esa particular mezcla putrescente entre Sludge, Crust y Doom puro y duro.
2018 trae un giro al sonido, mucho más centrado en el Doom/Death old school pero con importantes partes ambientales que pueden recordar a Unholy o Esoteric. Es Rvinae Ira, Creans Rvina Eo Tempore Est - Monvmentvm ab Khaos II y lo edita The Way of the Hermit, subsello de Darkwoods. Alguna otra cosa (Single y directo) en digital por ahí, y nos vamos del tirón a este Split, pero antes, vamos con Ballard. Me es prácticamente imposible separar su historia de la de los BERUNA que resumo rápido con una entrevista (y reseña de Karabaka, 2013), un directo de 2015 y, si no recuerdo mal, ya extintos pero a modo póstumo sacan una reedición/recopilación de Mingorri (en Grindetxe) y el impresionante y autoeditado LVR de 2017, que la banda tuvo el detallazo de fabricarme una apabullante edición limitada en formato físico. Más o menos por estas fechas, es cuando surgen Ballard............
Una vez más, tenía que entrevistarlos para saber qué, quienes y por qué surgen... además de analizar su Demo 2017. El éxito tenía que llegar porque la semilla estaba plantada. Nacer, Vivir, Morir en el Mismo Lugar por Grindetxe / Discos Me Cago en Dios es un impresionante vinilo al que le sigue el single autoeditado (y de precioso acabado). Haciendo esta pequeña inroducción, me doy cuenta de que se me ha pasado (no tenía ni la más remota idea) y no tengo (cosa que tengo que remediar) otro Split con la banda Traidor (2019, Domestic System). Entono un `mea culpa´ y a ver si lo pillo pronto.
¿Por qué este nuevo Split?. Creo que ellos lo explican mejor que yo: "Un vínculo invisible, pero no por ello menos robusto, ha unido siempre a Hipoxia y a Ballard, una unión que viene dada por el respeto mutuo y por una particular visión compartida que finalmente ha tomado la forma de esta cinta compartida. Coeditado por las propias bandas y los sellos Caín Records y Conjuro Records, este split es la sublimación de todo lo que son Hipoxia y Ballard: dos bandas empeñadas, cada una a su manera, en reflejar lo decadente de una sociedad que parece destinada a autodestruirse".
La casete, en glorioso blanco y negro, es fruto de la coedición entre el sello de culto CAÍN RECORDS, que creía que ya no existía y me he llevado toda una sorpresa (por ahí tengo esas primeras ediciones de Error de Lazharus y el doble Cdr de Dispersed Ashes que reseñé hace una década) y EL CONJURO RECORDS procedente del sur de la Patagonia Argentina). Por lo demás, impresionante artwork y fotografías (especialmente la del interior) para un objeto de culto desde ya. Vamos con la música.
(HIPOXIAN´ WARMONGERS)
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Abre la `Cara A´ el temazo "False Destiny", de 15 minutazos y según los créditos las baterías y sintes están `grabados en un lugar impregnado de muerte. Elr esto se divide entre los Empty Hall Studio, Cave R(d)OOM y la mezcla y masterización de Simón Alvar. Apertura con un sonido mucho más depurado y siguieno la estela del anterior álbum, destacan la profunda evolución como músicos sufrida en Hipoxia; una mayor hincapié en lo melódico y en esos requiebros de guitarra propios de los Anathema de sus primeros discos (a medio caballo entre el Doom / Death y cierto toque espacial). La base rítmica, angular y nunca predecible, va abriendo camino y arropándose de ligeros y atmosféricos toques de teclados... estructura de himno, quizás recordándome un poco a lo que hacían los Ophis con su excelso debut Withered Shades o lo que es lo mismo, un Old School Death ralentizadísimo, agonizante y con toques depresivos cercanos a los Bethlehem del Dark Metal.
Otro de los aspectos que identifican a
Hipoxia como una de las bandas más sorprendentes del género a nivel nacional es el uso abstracto de las guitarras que pergeñan y despliegan riffs a medio camino entre
Evoken y
Esoteric, con parada de respiro en
Disembowelment... pero ojito, que la madurez de los madrileños es más que evidente y rezuman su sonido propio.
Toques de Funeral Doom quedan de manifiesto en unas voces absolutamente agonizantes que parecen provenir de la tráquea del sistema respiratorio del Universo. Gutural pero con ese eco característico de gente como
Greg Chandler. Afortunadamente, y por cuestiones personales, prefiero que se deje un poco de lado el Sludge y se centren en abordar la oscuridad desde otros ángulos. Yo, que los ví en directo en un alucinante concierto (
aquí), doy fe de que esta peña son capaces de invertir el peristaltismo cósmico y hacer cagar a Dios por la boca. Conforme avanza el tema sube el tempo y nos metemos en un auténtico vórtice con dobles bombos y un manifiesto nihilismo violentísimo que por poner un ejemplo, podría recordar a una versión menos caótica de
Teitanblod. Damos la vuelta a la cinta.
(BALLARD MINDTRIPPERS)
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"Atraganto", tema de los Ballard, son otros 15 minutos grabados en Red Donkey Estudios masterizados pro J. Espinosak. A pesar del sosegado inicio basado en lánguidos riffs de guitarra, imposible olvidar el sustrato Crust Punk a la vasca de gente como Akauzazte. Precisamente a éstos recuerda la percusión ritual / procesionaria que va dando forma al corte, que de forma biliosa estalla en el minuto 2 con las voces encabronadas y un largo acople de la guitarra... voces por cierto, que aun más cercanas al Sludge me recuerdan en este nuevo trabajo a gente como los denostados MOSS (glorioso Sub Templum) o ese absoluto y devastador himno a la oscuridad que son los BUNKUR. Otro de los aspectos que me ha encandilado es que Ballard suenan aquí más Funeral Doom de lo habitual, llevando el tempo al límite del desgarro; como una visión psicopómpica su música transcurre en el inframundo al que se llega mediante ritos de paso y cada vez que la base rítmica coge fuelle y se endurece de forma sincopada se notan las arremetidas en la base de la columna.
Lentos, asfixiantes y opresivos, destaca un uso de la guitarra casi minimalista... espaciado y plagado de acoples al menos en la parte inicial porque llegados al minuto 7 se acabalga todo y nos vemos inmersos en un épico clímax mitad Reverend Bizarre y mitad Lords of Bukkake o Moho (pero llevado todavía más como digo al terreno del Death/Doom). Podría definir esto más, pero al fin y al cabo la música son sensaciones y a estas alturas estaréis hasta las gónadas de plomo de mis frases reiterativas. Prescindid de un tatuaje y haceos con esta cinta que luego lloraréis lágrimas de alquitrán cuando se agote.
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