El día de hoy ha sido intenso. Me he dado cuenta de que si libero una de cada dos células de mi cuerpo consigo ver más películas, ser más liviano y desplazarme con mayor pulcritud. El problema es que bueno, quizás sea algo drástico este tipo de cirugía estética radical en la que uno se ve exactamente reducido a la mitad, y tengo miedo de que alguien pueda encontrar la otra mitad de células que he soltado y montar el rompecabezas que sería otro CORONEL MORTIMER igualito a mí y qué se yo, usarlo para fines incluso no benéficos.
Así que me he arrepentido y me he puesto a recoger toda esa parte sobrante de mí que he ido dejando por ahí pero con la mala suerte de que no recuerdo dónde he dejado la otra mitad de neuronas. Se ruega ayuda para intentar reconstruir mi psique en la medida de lo posible... incluso he probado a añadir otras partes de otra gente que he encontrado pero no sé, me noto raro y como que no pienso igual.
Tengo miedo... ¿y si dejara de gustarme el fantaterror?.
Si alguien encuentra o se topa alguna de estas neuronas por favor que me contacte en el siguiente número... mierda, he perdido la parte que recordaba el teléfono. Bueno, dejádmelas en la taquilla del Albéniz con un sobre a mi nombre.
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JUNGLE (Australia; Greg McLean, 2017)
El irregular director de "Wolf Creek" o "The Belko Experiment" (algunas más tiene, pero igual de reguleras) se lanza ahora a una producción de supervivencia y aventuras que narra las peripecias de Yossi Ghinsberg, aventurero de origen israelí que se perdió en la selva de Bolivia en plena Amazonia en la década de los 80. Rodada entre Colombia, Bolivia (Maldidi Park) y Australia (Mount Tamborine) la película es a todos los efectos un producto de entretenimiento puro y duro sin muchas más pretensiones que cualquier fórmula estadounidense al uso.
Buena fotografía, correctas interpretaciones (demasiada sonrisa dentífrico de Daniel Radcliffe) y lo que suele sucederme con este tipo de producciones. Casi que estoy deseoso de que terminen para ver las fotografías de los personajes reales. No voy a negarlo, me gustan mucho las películas de supervivencia y naturaleza pero en mi humilde opinión ninguna cámara podrá captar nunca las peripecias de gente como Ghinsberg, que llegó a empalarse el recto con una rama en una caída. Para pasar el rato.
A favor: la fotografía, la conexión con la naturaleza y el espíritu de amistad del grupo.
En contra: producto americanizado en exceso.
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DHOGS (España; Andrés Goteira, 2017)
Muy interesante película rodada gracias al crowfunding dentro de la sección Insólitos/Indómitos y que ha contado con la presencia de su director. Varias historias que se van fundiendo unas con otras a través de un sutil hilo conductor, con la particularidad de que todas ellas están siendo observadas por impertérritos espectadores. De la trama poco más quiero contar, porque sería hacer un spoiler importante, así que intentaré marear la perdiz un poco.
Comportamiento dócil versus comportamiento perverso vendría a ser el dualismo que mueve la cinta, que está grabada con mucha maestría pese a los déficits de presupuesto, aprovechando los recursos tal y como se van presentando y obteniendo finalmente un remedo de thriller, drama y tal y como su propio director concluye al final de la proyección, simple cine de entretenimiento. Personalmente me ha parecido muy lograda e interesante, con alguna que otra escena de bastante crudeza visual. Destacar también la banda sonora, con un buen score a base de zanfoña y throatsinging al más puro estilo tibetano que crea una densa maraña "drone" inquietante cuanto menos.
A favor: lo que puede hacerse con pasión y ganas.
En contra: no es tan insólita ni tan indómita.
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LOVE ME NOT (Grecia; Alexandros Avranas, 2017)
Durísima película de Avranas al más puro estilo "Kynodontas" de Yorgos Lanthimos (2009) pero además añadiéndole toques del cine visceral de Michel Haneke, creando una mezcla explosiva no apta para todo tipo de públicos. Una pareja paga los servicios de una muchacha como vientre de alquiler, para poco después aparecer completamente calcinada. A partir de aquí, el cine bilioso griego se mezcla con el francés a lo Romain Gavras o el incómodo Gaspar Noé (curiosamente la película es una coproducción entre Grecia y Francia) dándonos una serie de largos planos aparentemente asépticos pero cargados de una fuerza tremenda.
No creo que haya medias tintas en el cine de Avranas, especialmente en "Love Me Not". O te gusta o directamente sales indignado de la sala. Potente, cruda y con un final que deja a "Canino" a la altura del betún. Más drama que cine de terror al igual que ocurría con "Miss Violence" (2013) donde por cierto actuaban tanto Christos Loulis como Eleni Roussinou. Destacar especialmente la interpretación de ella en las incómodas y sórdidas escenas finales. Cine de autor en estado puro.
A favor: sordidez cinematográfica sin tapujos. Cine de autor.
En contra: verdaderamente es incómoda.
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THE ENDLESS (Estados Unidos; Justin Benson/Aaron Moorhead, 2017)
Dos hermanos vuelven a una secta de la que salieron una década atrás para encontrarse un idílico y familiar ambiente. Poco a poco vuelven a cuestionarse las razones que los llevaron a su marcha y posterior denuncia como secta destructiva.
Bueno, vayamos por partes. "The Endless" es una fantástica película de terror sobrenatural con tintes de thriller grabada con maestría y un trabajo encomiable a las labores de guión... pero lo que verdaderamente me ha dejado con el culo pegado al asiento no es eso. Durante todo el metraje tenía la sensación de que estaba viendo otra película que ya había visto con anterioridad (no había consultado nada de los directores por falta de tiempo), pero no me entendáis mal; a lo que me refiero es a que se me venía a la cabeza una película en la que dos amigos se encontraban en una cabaña.
Uno de ellos ataba al otro para intentar desintoxicarle de su adicción a las drogas, para luego irse todo tornando en un despipote padre... pues imaginad cómo me quedo cuando en el último tercio de "The Endless" la película acaba conectándose con uno de los fotogramas de la otra a la que me refiero ("Resolution" de 2012) para configurarse en una misma pieza de un puzzle. ¿Difícil de entender lo que estoy contando?. Dicho de otro modo, "The Endless" profundiza en el universo de "Resolution" a modo de Spin Off (o algo así) y yo no tenía ni la más remota idea. Me tiro toda la película pensando en la otra y de repente, como si de una bisagra se tratara, van y se unen las dos.
Delirante, imaginativa y lovecraftiana, "The Endless" está recogiendo premios allí donde se presenta y se lo merece con creces. Además, sus directores tienen otra joya titulada "Spring" de 2014 que no tiene desperdicio alguno. Para más inri, hacen un yo me lo guiso y yo me lo como interpretando tanto "Resolution" como esta "The Endless".
A favor: imaginación al poder en una cinta muy entretenida y bien urdida en todos los detalles.
En contra: nada, estas películas son más que necesarias.
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Para terminar, sólo un apunte.
La fauna de los cines a veces es de otro planeta. Determinados individuos/individuas tienen la sana costumbre de convertir las películas en experiencias audiodescritas... esto es, acompañan cualquier cosa con interjecciones, suspiros, comentarios y demás idiocias. Estas personas deberían de quedarse en casa, o al menos ponerse un auricular conectado a su propia mente para escuchar lo ridículos que resultan. Ya no es el ruido de la comida, ya es que no paran ni un segundo de comentar todo con ruidos de toda índole. Se lo deberían de tratar antes de salir de casa.
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