"Adaptación cinematográfica de la historia corta de H.P.
Lovecraft sobre un escéptico docente universitario experto en folklore
desafiado por un erudito colega nativo de Vermont a comprobar la
existencia de seres sobrenaturales en las montañas de la zona."
Debut a la dirección de SEAN BRANNEY recreando los universos oníricos y ominosos de H. P. LOVECRAFT, aunque previamente ya había trabajado en el guión de la maravillosa y superior a esta, THE CALL OF CTHULHU (ANDREW LEMAN, 2005), mucho más experimental y arriesgada. THE WHISPERER IN DARKNESS también utiliza el blanco y negro para reforzar el ambiente opresivo y añejo de la trama, aunque dejando de lado el cine mudo de la otra. Estableciendo más comparaciones, si THE CALL OF CTHULHU estaba más basada en el cine mudo de los años veinte y treinta, aquí en THE WHISPERER OF DARKNESS se hace más hincapié en el cine de las décadas de 1940 y 50.
H.P. LOVECRAFT HISTORICAL SOCIETY (fundada entre otros en los 80 por el mismo Branney y Andrew Leman) y la compañía productora FUNGI son las encargadas de financiar y producir esta película y perpetuar así la memoria del visionario escritor americano, en cuyo relato publicado por WEIRD TALES en 1931 está basado esta película.
Analizando ya los aspectos técnicos, tenemos aquí una fotografía limpia en blanco y negro muy deudora del FILM NOIR y que pretende homenajear a los grandes clásicos del cine de terror y cienca ficción. Desde los primeros fotogramas de la película (inconmensurables), con esa vista aérea de ruinas ignotas perdidas en la jungla, y el posterior enfoque de la boca de una cueva, hasta los toques a ciencia ficción añeja deliciosamente retro de la máquina para "almacenar cerebros", THE WHISPERER IN DARKNESS está cuidada hasta los más nimios detalles, con una perfecta ambientación, desarrollo y dosificación del suspense. La verdad sea dicha, la película me ha recordado estéticamente a KING KONG (MERIAN C. COOPER, 1933) y a las películas de la mítica RKO PICTURES (Radio-Keith-Orpheum) estadounidense (entre ellas la propia KING KONG), a la que se homenajea acertadamente aquí.
Si bien no es fácil adaptar al cine al escritor de Providence (aunque se ha hecho hasta la saciedad), hay que resaltar lo bien que le sienta el blanco y negro a las historias lovecraftianas y lo brutalmente de actualidad que están las historias de los mitos primordiales cuthulhianos, que lejos de caer en el olvido, se reinventan, resurgen y retroalimentan dándonos sorpresas como la de esta genial película.
Así pues, recomendar las dos películas producidas hasta ahora por la HPHS y esperar que sus miembros nos den más sorpresas como ésta. Aquí os dejo el trailer de ambas:
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