Extrañísima película la que analizamos hoy. Claustrofóbica y sutil, LONG WEEKEND es un film de suspense australiano que tiene por protagonistas a una pareja en crisis. Pronto nos daremos cuenta que LARGO FIN DE SEMANA no es una película de horror al uso y es que el film respira un aura de rareza nada desdeñable que te mantiene pegado al sillón.
¿Qué tienen que ver una radio que da noticias de animales que se revelan contra la naturaleza, una pareja en crisis a raíz de un inesperado aborto voluntario y un agresivo esposo que la emprende violentamente con todos los animales que se ponen en su camino?... lo único cierto en este film es que la atmósfera y el desasosiego prima sobre la abierta trama, que posiblemente no guste a aquellos que disfruten de historias cerradas y trabajadas, pero que ganará muchos enteros para los amantes del más puro y genuino cine de suspense y horror psicológico.Rodada en plena Australia con una fotografía encomiable, su protagonista John Hargreaves ganó el premio en Sitges 1978 al mejor actor. El hombre en soledad en la naturaleza se muestra indefenso y los silencios se vuelven más amenazadores... y todo esto se ve reflejado en la magnífica dirección de COLIN EGGLESTON, que sustituye la falta de recursos jugando con las sutilezas de la trama haciendo que mantengas tu atención en lo que está sucediendo en la pantalla hasta que los títulos de crédito finales te dejan absolutamente perplejo.
En 2008 el también australiano JAMIE BLANKS (artífice de bodrios como LEYENDA URBANA o el remake de UN SAN VALENTÍN DE MUERTE) dirige un remake con JIM CAVIEZEL de protagonista que sinceramente no he visto, pero que no me llama la atención demasiado.
A los que busquen una rareza olvidada y gusten del buen cine de suspense con un toque de autor, LONG WEEKEND probablemente no les defraudará.
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