Hay olores que evocan a épocas pasadas. Olores en extinción porque la generación que los consume está abocada a fenecer. Son aguas de colonia y aftershaves que han aguantado estoicamente el correr de los tiempos, provocando las náuseas de más de uno cuando se han unido inseparablemente al sudor y al olor corporal. En discretos botes o en garrafas y tarros de cristal, las droguerías dispensaban estas aguas de colonia por litros. Se ponían en ingentes cantidades sobre pelo, cara, ropa... en fin, toda aquella superficie susceptible de ser bautizada en tan magna ceremonia...
Y aquí queremos rendir homenaje a esos olores de colonias añosas que nos han acompañado en nuestra vidas; que nos han marcado como personas y nos evocan con nostalgia fotografías en blanco y negro o sepia de nuestros antepasados y sus objetos.
Pongámonos las galas y unas generosas gotas de nuestra colonia favorita, que nos vamos a buscar novia...
BRUMMEL...
LUCKY...
MAJA....
AGUA BRAVA...
OTELO....
ANDROS...
PATRICHS...
Y LA ESTRELLA INDISCUTIBLE ES....
Pongámonos las galas y unas generosas gotas de nuestra colonia favorita, que nos vamos a buscar novia...
BRUMMEL...
LUCKY...
MAJA....
AGUA BRAVA...
OTELO....
ANDROS...
PATRICHS...
Y LA ESTRELLA INDISCUTIBLE ES....
JOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO, QUE ASQUITO DE OLORES!!!! a mi de la de Andros me gustaba el anuncio del tio bailando el sirtaki, lo único.
ResponderEliminarhttp://elclubdelaslocaspositivas.blogspot.com/
Se me han olvidado otros clásicos como CHISPAS y FARALA....
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