martes, 16 de junio de 2020

ZWICKY - "MiNoBlues" (NENUFARIA, 2020)


Los primeros compases de "Según Se Mire", tema que abre MiNoBlues, debut de la banda malagueña de Jazz ZWICKY, tiene la particularidad circular única de esos temas que se abren con una serie de notas sostenidas (divagadas) que suenan más a final de un corte que comienzo, no sé si me explico bien. Una cortísima melodía de guitarra eléctrica desemboca en un loop arropado por una base rítmica nostálgica (huele a Cool Jazz) pero que si se examina al microscopio auditivo abre espacio entre notas sugiriendo un abanico de posibilidades propio de la Improvisación Libre menos agresiva en la ejecución. Sin llegar a lo puramente académico, ZWICKY bebe de cosas como el Cosmic Jazz post Coltraniano, el Swing teratogénico y siempre bizarro de Sun Ra y (aquí puedo equivocarme), ese espectral sonido meditabundo de las ediciones de ECM en los 70.

Al minuto es el bajo el que hace/repite el juego soltando varias notas consecutivas triangulándose luego con el motivo inicial. Abstracción amable en cada uno de los instrumentos, el lirismo juega de forma melódica (que no melosa) `sugiriendo´ y dejando ver por el rabillo del (oído) ojo . Se huye de la agresividad para buscar el ambiente clásico (que no añejo) en la guitarra eléctrica de Javier Berrocal; por otro lado, la base rítmica (Pepe Triano al bajo y Emilio Salvatierra a la batería) aun tendiendo hacia el Bop sí que se muestra poliédrica en esencia, especialmente en el bello puente que une cada uno de los solos. Es curioso, pero se trata de un tema que puedes cortar casi por cualquier sitio y unir luego donde quieras que el resultado es siempre el mismo al oído. Como una Matrioska jazzística vaya...


Hace acto de presencia aires propios de la música clásica contemporánea en el abordaje inicial de "Geometría de las Olas". Al no existir vientos, el oyente puede despistarse un poco en lo que escucha, pero cuando rompe la música lo que escuchamos entra dentro del terreno de una exquisita improvisación libre medida al milímetro, cargadísima de detalles de orfebrería musical y algún apunte que recuerda al Jazz Rock no Canterburiano pero sí (otra vez) contemporáneo. La gran variedad de recursos de Salvatierra a la batería hablan de una percusión más que profesional, virtuosa pero sin fórmualas matemáticas espesas. Discurre el medio tempo a caballo entre un Blues abstracto y una nana susurrada por un Henry Mancini en fase Hipnagógica. Las cuerdas (guitarra y contrabajo) zurzen volutas sonoras complicadísimas en un crescendo (el título lo dice) geométrico, angular y que de existir un saxo de apoyo subiría enteros según mi humilde opinión (bueno, un clarinete bajo siempre me seduce bastante).

La nitidez con la que se desenvuelve todo es obra de la grabación y mezcla de Daniel Pineda y Zwicky en Moby Dick Estudio, con posterior masterizado de gala por Máximo RB en Hollers Analog Studio. Sobre la portada y el artwork no os voy a comentar nada y os emplazo directamente a la entrevista que incluyo más adelante. Sigo con la audición...


Una caja circense abre "MiNoBlues - Lullaby". Un tema precioso, que te mece con sus aires salitrosos y pseudo Folk en su primera mitad, y que luego vuelve a mutar en un segundo arreón más visceral con quiebros nuevamente hacia el Jazz Contemporáneo. Cuando las notas se juntan y crece la intensidad (justo antes de la melodía de bajo con arco) me recuerda un poco a una versión más reducida de los nórdicos de culto Atomic. No es hasta que has puesto el disco al menos 4 o 5 veces en que todo el sustrato que hay en MiNoBlues sale a la superfice; escuchas superficiales no dan resultados óptimos (casi nunca lo dan, y en estos estilos menos). Es fácil dejarse llevar por la agresividad de un saxo tenor para decir que tocan Free Jazz, mientras que es muy difícil captar esas mismas sensaciones cuando los vientos no andan presentes, volcándose el conjunto más hacia el lado Contemporáneo o directamente Cool para los muy despistados.

Sigue  "Save the Kiwi", tema nada habitual en forma y estructura, y vertebrado por una obsesiva línea de guitarra y un metronómico patrón de batería (posiblemente este sea de los más Jazz Rockeros del disco). Me gusta mucho cómo se entrelazan los instrumentos, formando mini Jams (o mini solos, no sé cómo expresarlo) que huyen de interminables arengas masturbatorias (el contrabajo por ejemplo, es exquisito a lo largo de todo el álbum). "El Hombre Gusano" es una tripa eventrada del anterior. Mismo espíritu pero con un nivel técnico muy superior (un bajo que engarza notas larguísimas, elongadas y "destensadas", la guitarra microtonal o la ebanistería de Salvatierra en lo percusivo).


El tramo final se mueve entre el regusto mediterráneo y Hard Bop de "Leo, Jaleo" con un tramo final de órdago sobre todo en el Contrabajo, que suena aflamencado para luego dejar paso a que se explaye la guitarra, mientras la batería gana en peso molecular estrechando el espacio entre notas. Con todo, me quedo con "Resumen de Tí", fantástico título para un curioso corte que parece estar construído con retazos de los 6 restantes. Un puzzle jazzístico de alcurnia para paladares pacientes.

Sin más, dejo que sea Emilio Salvatierra quien responda un pequeño cuestionario sobre la banda:

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1. Escuchando en profundidad “MiNoBlues”, uno se da cuenta rápidamente de que no está ante músicos amateurs. Aquí hay un nivel técnico alto y es palpable. ¿Quiénes forman ZWICKY y de dónde vienen?. ¿Podríais resumir un poco la trayectoria biográfica de la banda?.

Zwicky somos Javier Berrocal a la guitarra, Pepe Triano al contrabajo y Emilio Salvatierra a la batería. El origen musical de los tres está ligado a la música popular, sobre todo al folk y el rock. Javier Berrocal como miembro fundador de Perrocal una banda muy interesada en la música folclórica de distintos países, Pepe Triano de la escena malagueña del metal con su banda NRS y yo como miembro de 713avo amor y Después de nunca en lo que podíamos llamar rock experimental o algo así. Además de esta experiencia los tres hemos recibido formación académica musical, Javier y yo en el conservatorio y Pepe en el Taller de músics.

En un principio Javier y yo comenzamos probando a tocar algo de música improvisada e intentábamos encontrar un lenguaje apropiado en el que hacerlo. Los dos habíamos estudiado algo de jazz y pensamos que nos aportaba las estructuras flexibles que necesitábamos para ordenar nuestras ideas, así que nos centramos en él. Fuimos probando algunos músicos y formaciones hasta que encontramos a Pepe. A partir de ahí la formación fue variando, probando a tocar con otros músicos, cambiando a cuarteto y quinteto hasta consolidarse como trío y tomar su nombre. Y en este momento, esa es nuestra formación.


2. Ya que estamos, si me explicáis de donde viene la palabra ZWICKY os lo agradecería… si tuviera que apostar, viendo la portada y tirando de acervo, me inclinaría por el apellido del astrónomo Fritz Zwicky, uno de los pioneros en descubrir partículas y la materia oscura del Universo. 

Sí, precisamente de él tomamos nuestro nombre. Es un personaje muy curioso, muy poco reconocido en su época por sus teorías y de carácter muy particular. Tuvo grandes intuiciones que solo el paso del tiempo han podido demostrar. Nos pareció un personaje muy interesante y fonéticamente nos encantó su nombre, aunque no tengamos nada claro como se pronuncia realmente.

Lo mejor de todo es que después de tomar su nombre, investigando un poco sobre él, descubrimos que creó una técnica de resolución de problemas que se suele llamar “la caja morfológica”. Sin entrar en detalles, es una técnica que busca conseguir la mayor combinación posible de opciones entre las variantes de un problema, sin tener en cuenta lo descabelladas que puedan ser estas. Ese “invento” nos encantó, creo que es una de las características de nuestra música, la mezcla y combinación de elementos de distintos lenguajes musicales, en muchas ocasiones guiados por la intuición y el bagaje musical de cada uno, sin tener muy en cuenta la lógica de la estética y el estilo. 

3. A pesar de que escuchas rápidas del disco puedan llevar al oyente a confundir la propuesta de vuestra banda como Cool Jazz, en la base se captan y mueven al exterior efluvios de Jazz Rock, especialmente en el uso de la guitarra. ¿Cómo definís vuestra propia música? ¿Qué parte de improvisación y qué parte de composición hay en “MiNoBlues”?.

Creo que la sonoridad del disco es calmada y bastante intimista, no sé si eso podría acercarlo al cool jazz, y como este género, creo que es bastante apreciable la influencia de la “música clásica” en él, especialmente de la música de cámara para guitarra del siglo XX. Creo que hay también elementos del rock, que en el contexto pueden sonar a jazz rock, pero también hay elementos del free jazz o la improvisación libre que me parecen significativos.

Como te comenté antes, en un principio simplemente queríamos hacer música improvisada, música en el instante, pero en el intento tomamos conciencia de lo necesaria que era una estructura para desarrollar esas improvisaciones. Buscando esa estructura nos acercamos al jazz, movidos por nuestra admiración por Coltrane, Ornette Coleman o Alber Ayler e intentando comprender su música nos dimos cuenta de que teníamos que aprender de la tradición que les precedía. En mi opinión la música de Zwicky es resultado de este proceso, toma elementos de lo aprendido e intenta encontrar una entidad y estética propia sin prejuicios de estilo. 

En el disco, como en nuestra música, hay partes que están claramente estructuradas y compuestas, con otros que son espontaneas. Hay temas con una forma clara (tema, improvisaciones, reexposición) con otros en que se suceden secciones escritas que sirven de puente a otras totalmente improvisadas y contrastantes. Cada tema va pidiendo un tipo de desarrollo e intentamos ir dándole el que necesita.


4. ¿Por qué os decantáis por el formato trío?... he tenido acceso a información y juraría que llegásteis a ser un quinteto con vientos. ¿Descartáis el uso de instrumentos de viento en futuras grabaciones?.

Bueno, más que elegir el formato de trío, él formato nos ha elegido a nosotros. Los tres llevamos tocando juntos desde el año 2006 con algunas pausas por asuntos personales y con el paso del tiempo las circunstancias han ido determinando esta formación. Consideramos la formación de trío como algo abierto y nos encantaría que se ampliara.

5. El acabado del CD en cuanto al artwork y demás es muy bonito. ¿Por qué elegís las pinturas de José Díaz Oliva?... la verdad es que pienso que son un acierto y definen el sonido de la banda. Las pinturas surrealistas de Díaz Oliva son una auténtica maravilla, por cierto.

Me alegro mucho que te guste. Todo el artwork esta sacado de un fragmento de una obra de Díaz Oliva con la que llevo conviviendo desde que tengo recuerdo. Tuve la gran fortuna de conocerlo personalmente desde niño por ser amigo de mis padres y siempre me atrajo su obra. Creo que es un pintor desafortunadamente desconocido y que merece un reconocimiento urgente. 

Para mí también existe cierta conexión entre el surrealismo y nuestra música, no es algo intelectualmente buscado, simplemente lo siento así. Quizás por permitir que nuestros bagajes musicales personales se mezclen sin mucho control intelectual, por dar espacio a relaciones musicales intuitivas en ella. 

6. O yo desconozco bastante el circuito, o no hay demasiadas bandas por aquí haciendo vuestra propuesta. Sin ir más lejos, creo que Malheur (banda de Sevilla de similar sonido) se separaron. Sin embargo, hace unos años había una fructífera escena en el sur en lo que a improvisación libre y Jazz se refiere. ¿Cómo veis la escena en cuanto a Salas, bandas y público?. 

Bueno, no me parece que pueda hablar en términos generales de este tema, no creo que tenga conocimiento para hacerlo. Solo puedo comentar lo que he experimentado personalmente. 

Hace unos años sí que se despertó cierto interés por el jazz en Málaga, parte por el empuje de un grupo de músicos jóvenes que tocaban maravillosamente y que tenían ganas de hacer cosas. Se creó la CAM, hasta donde yo conozco la primera escuela orientada hacia la música improvisada en la ciudad, había una Asociación de jazz que comenzó a funcionar en la Escuela municipal de música de Alhaurín de la Torre y florecieron algunos clubs que programaban este tipo de música con regularidad. 

En Jerez comenzó a funcionar un proyecto de improvisación libre muy interesante y pionero por estas tierras, Entenguerengue, la primera orquesta de improvisación libre andaluza. Parte de Zwicky estuvo participando en ella y fue una experiencia estupenda. La actividad del colectivo estaba conducida por un gran pianista de improvisación libre, Alejandro Rojas- Marcos y gracias a nuestros encuentros tuvimos la suerte de trabajar con Chefa Alonso, Ricardo Tejero o Agusti Fernández (por citar a tres), músicos de nivel internacional y que rara vez habían visitado nuestras tierras. 

En este momento la situación es muy diferente. Casi ningún club ha superado el paso del tiempo y el público perdió progresivamente el interés por esta música. La administración municipal intentó convertir este interés cultural en una nueva forma de publicidad y olvido promover realmente los elementos necesarios que hacen crecer la vida cultural de una ciudad. Quedan un grupo de músicos jóvenes que gozan de cierto prestigio y que son los que tiene acceso a las programaciones y algún club o bar que sigue peleando para mantener una programación estable, por lo demás no hay mucho espacio para propuestas.

Afortunadamente aun quedan colectivos y músico con ganas de hacer cosas en el sur. Personalmente creo que hay que escuchar Sputnik trío, Hidden forces trio, Larsen C & the millenials y Alejandro Rojas-Marcos con Ferran Fages... y si te apetecen sonoridades mediterráneas, Zirvia.


7. Creo que hay un subdisco dentro de “MiNoBlues”. Aparentemente sencillo, escuchas sucesivas revelan recovecos que pueden dar lugar a improvisaciones en vivo muy interesantes… en algunos aspectos, casi que diría que los siete cortes que habéis compuesto son piezas estándar para la elongación y transformación en directo. Dicho lo cual… ¿Es ZWICKY una banda de directo?.

Sí, sin duda. Creo que en general toda la música que se desarrolla a través de la improvisación se debe escuchar en directo, es el momento en que toma sentido pleno. Los discos son uno de los posibles desenlaces de un tema, pero no son el tema. Los temas cambian en función del lugar donde toques, del orden del repertorio o de las condiciones de escucha que tengas. De hecho, una de las circunstancias que más ha condicionado como han terminado sonando las composiciones en MiNoBlues ha sido las condiciones en que se grabaron. 

8. Este es vuestro espacio para que os despidáis como queráis, contéis planes de futuro o lo que se os ocurra… eso sí, antes de despediros quisiera que me comentárais qué significa SUN RA para vosotros?. Puede parecer una pregunta extraña para finalizar una entrevista, pero siempre he pensado que el verdadero Jazz es a la vez terrenal pero cósmico.

Bueno, creo que hay creadores que por sus ideas y sus actitudes terminan tomando una transcendencia que va más allá de su obra. En la música, para mí, están los ejemplos de John Cage y Sun Ra. En el caso del segundo, creo que es un creador realmente inclasificable, maravillosamente excéntrico y que hizo gala de una libertad creativa poco común. En ese sentido lo considero una referencia... además comparto con él su fascinación por el espacio... 

Para mi escuchar música es un poco como “viajar al espacio”, cuando cierras los ojos y concentras tu atención en la escucha es como si estuvieras en la nada y en la oscuridad comenzaran a aparecer los colores del sonido. Aparecen formas, clusters, bloques de sonidos, melodías que se mueven de un lado a otro con movimientos fugaces. Es una experiencia que te transporta a un lugar diferente. No siempre sucede este viaje, requiere bastante atención, pero desde que empecé a escuchar música lo he experimentado muchas veces. Hay muy pocas sensaciones comparables a estar “dentro de la música”, rodeado por ella, es un “espacio” aparte.

Personalmente me siento heredero de la forma de entender que significa hacer música que impregna el free jazz en los 60, el regreso a la concepción ancestral de la música como herramienta de conocimiento, de sanación y de vínculo social. Parece algo muy místico y lejano pero es algo muy común y tan sencillo como cantar tu canción favorita de rock cuando necesitas saltar y gritar para liberarte de las tensiones diarias. Creo que los miembros de Zwicky de diferente manera, según sus experiencias propias, comparten esa relación con la música. 

Respecto a los proyectos futuros, nos gustaría volver a la promoción y presentación del disco en directo en cuanto lo permitan las circunstancias y reactivar la idea, paralizada por los acontecimientos, de montar un repertorio a cuarteto con voz. Si conseguimos parte de eso, seremos felices.

Muchas gracias por el tiempo que nos has dedicado con la escucha del disco y la preparación de las preguntas para la entrevista. Creo que en el momento cultural que vivimos, con su saturación informativa, las propuestas algo más minoritarias y que no se mueven exclusivamente por un móvil económico quedan rápidamente sepultadas y olvidadas. Ahora más que nunca iniciativas como lo de tu blog y la dedicación que exigen son imprescindibles para que sigan existiendo propuestas creativas. 

También muchas gracias a las personas que hayan llegado hasta estas palabras por su tiempo y atención, espero que hayan sido amenas. 

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