Parece que el trabajo no siempre ha dignificado al hombre. Múltiples acepciones etimológicas llevan de la palabra Tortura a Trabajo. Desde el Latín Tripaliāre (torturar) se deriva al Tripalium, instrumento de tortura compuesto de tres palos, inicialmente empleado en el ganado pero que posteriormente se usaría en los esclavos. En francés Travail se enroca con Tormento o Fatiga, mientras que en italiano sería Travaglio, Trabalho en portugués y aunque la forma de la palabra cambie, en alemán Arbeit habla de sufrimiento y Work en inglés viene de Wrikan (persecución) o Rabota en Eslavo.
Una búsqueda de hemeroteca más exhaustiva os pondrá sobre la pista también de cómo el Tripalium se conecta con la Crucifixión y esta a su vez con el empalamiento, así que tiro de biblioteca personal y añado lo que decía Daniel Sueiro en La Pena de Muerte (1974) a propósito del tema: `Hay una relación clara entre el empalamiento y la crucifixión. Justo Lipsio, sostiene que éstos llamaron crux a todo suplicio levantado en el aire al que se ligaba o enclavaba al condenado. Lipsio divide ante todo las cruces en simples y compuestas; llama simples a las que sólo constan de un madero, y éstas las subdivide en las que sirven para la "afixión" y las utilizadas para la "infixión". En los maderos de "afixión" se liga o clava a las víctimas. Los maderos de "infixión" consistían en unos palos agudos que traspasaban al desgraciado de abajo arriba por medio del cuerpo hasta la boca´.
Este es el sustrato conceptual que mueve a Tripalum Ligatum, nuevo suplicio en cassette de YUNCLAS editado por MARBRE NEGRE donde destaca un sonido fantástico para ser una cinta (últimamente no es habitual conseguir buenos resultados) dentro del submundo pseudoactivista del proyecto, esta vez menos Techno pero sí más destilado y sugerente. Desde el Dark Ambient pasando por el Noise o el Martial, el disco se graba y mezcla entre Noviembre y Abril de 2019 usando material procesado en diferentes fábricas, industrias y demás (field recording puro y duro) con la ayuda de Aceralia y Pichi Broncomachine. El artwork son grabados muy acordes con la música (Sandra Arias).
Es precisamente al perder los característicos beats Techno que resalta mucho más toda la maraña férrica que subyace detrás de YUNCLAS, y para mí eso ha sido un gran acierto y continúa la línea argumental expuesta por la maravillosa De Lingua Ad Mortem (reseñada aquí), que no es sino evolución a su vez del Techno despiadado de Train to Finland (reseña aquí), a años luz en cuanto a calidad de la visceral cinta de Quebraes (reseña aquí). Entre medias tendríamos esa rara avis alucinante del Split con El Sonido del Vacío (aquí).
30 minutos que se abren con la percusión amenazadora y épica de "Dolor Machina", asaeteada fabulosamente por detalles ambientales de fondo que recuerdan al Dark Ambient de corte clásico con un pie en lo marcial. Es a máximo volumen cuando cobran vida detalles orfebres a base de acoples sobre una pátina electrificada que cuesta identificar... al rato parece una guitarra procesada, y al minuto surgen claramente golpes de martillo y lo que parecen sierras descomunales pidiendo paso por una chapa de acero.
Silbidos, emisiones de vapor y un ominoso ambiente ponen la carne de gallina. Una evolución fantástica en el submundo de YUNCLAS. Sigue "Patiens Vocatio", entrecortados indicios de que el Lo-Fi Techno podría hacer acto de presencia en cualquier momento, pero la infección decide desparramarse mediante un lento riff de guitarra (o parecido) afinado en el espectro fúnebre del asunto... vibrátil, pesadillesca melodía que se refuerza con una percusión directa y cruda como lo es el golpeteo de hierros.
El homónimo "Tripalium Ligatum" describe la tortura como mejor se puede hacer... con una melodía juguetona que parece sacada de una caja de música, pero pasada por la distorsión del Harsh Noise y embadurnándose de un ambiente psicodélico que lleva la música a un nivel superior. Mejor imposible. Así se cierra la Cara A.
"Patients Ad Mortem" y "Patients Mora" forman un díptico opresivo a lo largo de toda la Cara B. En el primero, a pesar de la oscuridad manifiesta, hay momentos de guitarra acústica que aparecen y se desvanecen como efluvios entre los ásperos engranajes de una maquinaria que nadie revisa desde su creación, creando un contraste marcado y meditabundo. Se roza algo parecido al Doom industrial en algunos momentos o más bien Power Electronics en un tempo lentísimo (excelentes las agudas voces; pocas, pero casi que mejor.... suele abusarse mucho del este recurso en el estilo). "Patiens Mora" es la continuación lógica del anterior, en la misma onda, pero tirando todavía más de experimentación y barroquismos.
Sin temor a equivocarme, uno de los mejores trabajos de Industrial de nuevo cuño que he tenido ocasión de echarme a las orejas, de un proyecto, YUNCLAS, del que vengo contando sus vicisitudes desde hace tiempo y que estoy seguro va a pegar un pelotazo. Al tiempo... y el que avisa no es un traidor... es simplemente un trabajador como tú.
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