Desde Turín os presento al quinteto GODLESS ENTHROPIA, formados en 2012: tras una demo (Dystopian Metaphors) y un EP (Politics of Fornication) traen su larga duración llamado TETRACYCLIC DOMINION, tremebunda apisonadora de Death Metal con muchísimos retazos Avantgarde, técnicos y progresivos dentro de una base de Brutal Death bastante clásico. Edita SYMBOL OF DOMINATION y HECATOMBE RECORDS en cd, y el artwork es obra de Simone Cavalera.
Tras la intro atmosférica de "Al - Qalyah", construida a base de acoples disonantes de aires orientales, nos estalla en toda la cara "Mother of Cain", suerte de mezclar a los MORBID ANGEL con DEICIDE, IMMOLATION y bestias pardas del estilo; un doble bombo apretado como los vaqueros de Michael Knight en El Coche Fantástico y algún que otro detalle Thrash.
Más extraña y técnica es "Into The Asylum", igualmente violenta pero con riffs de guitarra enrevesados que pueden recordar a ATHEIST, CYNIC o PESTILENCE. La verdad, es impresionante el sonido conseguido por los italianos... si no me equivoco, y viendo el libreto, el disco ha sido masterizado al menos un par de veces siendo su última parada el toque analógico de Hertz Studio en Bialystok, Polonia.
Por cierto que a más de un oyente los parones y arranques del final del tema le recordarán al Black Death de cosas como GOD DETHRONED por ejemplo.
Sigue la oscurísima "Witch Burning Princess", híbrido alucinante entre Brutal Death americano con un pie en el Grind y ritmos vertiginosos del bajo, que no para quieto un instante. Fantástico el interludio con solo de guitarra incluído a lo VEKTOR. Las voces en general guturales, con algún repunte más agudo y bien ejecutadas, por lo que pocas pegas podemos poner.
Parecidos parámetros en "Unpredictable Dementia (Mechanical Disease)" solo que la estructura de esta última se retuerce varias veces sobre sí misma, ralentizando o acelerándose (hasta rozar el Death Sueco) según va marcando un extraño riff de guitarra. Con todo, para mi gusto es de los temas más flojos del disco. Mucho mejor es la retorcida "Erase, Delete, Annihilate", versión Death de los VOIVOD y cosas así. Cuesta no pensar también en cosas como AT THE GATES de su primera época, sobre todo por la brutalidad de la música o esos lánguidos y flotantes riffs de guitarra que se asoman con una facilidad pasmosa.
Cogemos aire con el piano y sintetizadores de "Dysphemic Phaenomenons", bastante normalita y que podrían haberla omitido porque no aporta mucho. Hubiera quedado mejor seguir del tirón con "Third Eye, Cauterized" dentro de una estructura de Death bastante clásico que lo mismo puede recordar a GORGUTS que a DISMEMBER o los mismísimos DEATH.
Destaca otro pedazo de solo épico de guitarra antes de meternos con "Solecism I", con voces adicionales de Fabrizio Lord Jotun Prelini, y de aromas sin duda a lo OPETH. Es tal el contraste que lo mismo estoy ante un tema perdido de los SEPTIC FLESH y aquí quizás esté uno de los defectos del disco... ha entrado todo y no ha habido cribaje colándose temas muy buenos con otros más estándard que se parecen demasiado. En mi humilde opinión yo habría reducido minutaje pero a veces cuesta tanto sacar un largo que uno arremete con todo lo que tiene.
"Cause of Disease (Sprouts of New Hate)" ahonda por un Death más melódico y atmosférico. Toques Crust irrumpen en una vorágine a lo VALLENFYRE para que os hagáis una idea, alternándose pasajes letales en cuanto a brutalidad (la base rítmica es una ametralladora) con otros que demuestran que la banda tiene una técnica bastante elevada. Se recoge "Palace of Fornication" de su Single de 2014 donde destaca una bajada radical de tempo a mitad del tema a niveles Death/Doom (voces susurradas aquí y allá como es de rigor) y luego vuelta a acelerarse con una cabalgada a la sueca.
El tramo final lo forman "Adynation", mezcla perfecta de bilis y melodía a lo FEAR FACTORY de su etapa primera (muy buenos los detalles de samplers, efectos y el maravilloso riff de guitarra que finiquita el tema), la vuelta del doble bombo brutalísimo en "Solecism II", plagado de ritmos entrecortados y bizarros, y la final "The Heights of Eidos (Mother of Cain)" ya sumergiéndose en terrenos suecos sin complejo alguno.
En resumen, un muy buen disco de Death técnico que se habría beneficiado de destilarlo un poco más en duración y quitando algún que otro corte (14 son demasiados).
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