sábado, 30 de marzo de 2019

NOCHE DE CUERVOS FEST 2019


Hola buenas tardes. Me llamo CORONEL MORTIMER, no tengo cara, y os escribo desde el tronco de vuestro puto encéfalo. 

Ayer asistí a NOCHE DE CUERVOS 2019 bastante perjudicado. Lo primero, un bocadillo con 1 kilo de mantequilla Zas de un bar cercan pugnaba por alcanzar la superficie (por arriba y por abajo) de mi tubo digestivo. Lo segundo, es un poco extraño ir a un concierto de estas características cargado de valium por un puñetero problema traumatológico, así que perdonen ustedes sus eminencias si digo alguna tontería. 

Paso a contar algo de las bandas intentando obviar mis gustos personales. Así, de pronto y sin pensar, lo mejor de la noche sin duda fueron RED EYE y SINISTRO para un servidor. La asistencia al evento justa, demasiado justa. Tan justa que me entran ganas de coger el Listado Oficial de Metaleros de Málaga e ir pegando por los porterillos a cada uno en su casa para cantar las 40 al personal (quizás es que había sesión de tatuajes nocturnos, o las camisetas negras estaban en la puta lavadora). 

Se decía por los pasillos que 5 bandas eran muchas, pero bueno.... yo, con una costilla horadando mi parénquima derecho, aguanté, y ya no soy joven, así que no, no son muchas bandas. 

Vale, sigo. NOCHE DE CUERVOS es un festival que se consolida con un determinado estilo. Lo que para algunos es Doom, para otros no lo es. No voy a entrar en debates absurdos sobre etiquetas pero con las estanterías combadas de discos creo que ya he trascendido un poco ese asunto. Lo que sí es cierto es que como sigamos sin apoyar lo que tenemos, al final ANTONIO BANDERAS también se va a quedar el festival... pasará a engrosar otro de sus proyectos como no espabilemos y dejemos de lanzar mierdas en nuestro propio tejado. ¿No sabéis de lo que os hablo?... yo tampoco.

OSSORUS (Sevilla)

Jovencísima banda desde Sevilla tocando un estilo que a mí se me atraganta ya un poco pero siendo objetivos, desplegaron su repertorio con fluidez, buen sonido y profesionalidad... vaya, que a pesar de parecer un escenario grande para una banda de este estilo, no se achantaron y escupieron mala baba. Originalidad es lo que les falta... ese punto distinto que los aleje de tanto nombre egipcio a lo AMENRA, ISIS o los CULT OF LUNA. Al final los jodidos egipcios van a ser los primitivos inventores de un estilo que los especialistas en críticas se esfuerzan por catalogar de Progresivo y lo único de prog que han escuchado es PINK FLOYD, KING CRIMSON y la pesadez extrema de STEVE WILSON.

Soy más de estilos cercanos al Death y al Funeral Doom pero todavía me funcionan los huesos timpánicos y las conexiones cerebrales lo suficiente para saber que es el tipo de música que el público sureño busca; ¿problema?... extrema sobresaturación del estilo. La razón no la sé, pero es así tal y como debatimos luego unos cuantos entre bambalinas. Así que por mi parte, nada que objetar; banda quebranta cervicales en plena búsqueda de identidad que seguro tienen su hueco en el panorama.

Por cierto, camisetón de DOCE FUEGOS que estuve a punto de ponerme yo también.






RED EYE (ANTEQUERA)

Junto con SINISTRO, lo mejor de la noche. Su disco debut tocado allí íntegro con una soltura, unas ganas de disfrutar y una frescura que me cerraron el esfínter. Cada vez (creo que es la tercera o cuarta vez que los veo) más psicodélicos. Uno de los grupos que mejor sonó a todos los niveles... dobles voces mántricas a lo NAAM, SLEEP, ANCESTORS y todo lo que hay he dicho hasta la saciedad de una banda que me parece una mina a explotar. 

Cuando alguien sube así a un escenario, no te queda más que callar y disfrutar, te gusten o no. 

RED EYE al maldito ROADBURN ya. Musicalmente como ponerle banda sonora a los cuentos de LORD DUNSANY.




















REDEMPTUS (PORTUGAL)

REDEMPTUS cogen el último disco (antes de mutar a otras cosas) que sacaron GODFLESH y lo reducen a niveles primitivos. Sonaron más descarnados que en disco pero mantienen la identidad Sludge que caracteriza a otras bandas portuguesas como PROCESS OF GUILT. Tampoco es mi estilo de cabecera, pero esa forma machacona de la base rítmica que intenta lanzarse por terrenos a lo OCTOBER FILE o los últimos KILLING JOKE no me disgusta... no en vano su vocalista está ya más que curtido con estilos Grind y Punk (BESTA).

Si no me equivoco antes era un cuarteto, y creo que en directo el sonido se queda corto y falta algo. Intensidad Post Hardcore pero se pierden los detalles casi cinematográficos de sus discos y por ende la identidad.

Los amantes de CONVERGE todavía se están maturbando en la sala seguro y muy bien que hacen... mejor fuera que dentro.














THYRANT (MÁLAGA)

Presentando temas de lo que será su inminente segunda duración, con su nuevo vocalista con registros más Black, y tirando de Death melódico en los juegos de dobles guitarras. ¿Problema?. Pues yo capté rigidez y creo que la razón era que no estaban cómodos con el sonido. Los temas nuevos requerían de más finura en la tabla de mezclas y bajo mi opinión el técnico de sonido no estuvo a la altura. Me llegaba todo demasiado compacto y las progresiones de guitarra costaba captarlas.

A esa hora de la noche ya estaba perjudicado, pero los nuevos temas me parecen un cruce entre OPETH de etapa media y EDGE OF SANITY, pero ya digo que el sonido no me dejó disfrutar en plenitud. Lo mejor lo que se atisbó en los nuevos cortes y las voces old school.








SINISTRO (PORTUGAL)

Simplemente espectacular. Nada que objetar a una pedazo de puesta en escena como la copa de un pino. Su Fado-Doom de tintes casi británicos queda enaltecido con los tetánicos, espasmódicos movimientos de Patricia Andrade... yo creo que si Aaron Stainthorpe de MY DYING BRIDE, que tiene costumbre de retozar por el escenario, llega a subirse a tocar un tema, entre los dos montan la clara de un huevo a punto de nieve de tanto meneo.

Siempre hablo del elemento disruptivo. De algo que te diferencie de otras bandas en un panorama más que trabajado ya, y los movimientos de Danza Butoh, y las vocalizaciones (te gusten o no) iban como un reloj con unos melódicos despliegues de guitarra, una soberbia base rítmica y en definitiva un temazo detrás de otro. 

A pesar de que se pierden en directo los elementos Trip Hop (qué razón tenían esos pioneros Doomsters que metieron pasajes electrónicos en las postrimerías de los 90), sonaron crepusculares, decadentes y todo lo que un servidor quiere de, ESTA VEZ SÍ, de un estilo como el Doom Metal.












Nada más. Agradecer a la organización su buen hacer y que sigan apostando por cosas como estas en una ciudad que no merece más que patinetes en cada esquina. Quien no esté de acuerdo con mis opiniones que no me moleste... mejor que escriba las suyas.

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