Situamos nuestro viaje en 1988. Concretamente en Halifax, Inglaterra. Unos jovencísimos Edward Edmonson (bajo), Greg Mackintosh (guitarras y teclados), Matthew Archer (batería), Aaron Aedy (guitarra rítmica) y Nick Holmes (voces) surgen desde el underground británico para crear PARADISE LOST.
Totalmente a contracorriente, PARADISE LOST echan el freno a la velocidad con su podrido Death Metal primigenio para crear un nuevo sonido que marcaría época: el etiquetado como Doom/Death...
Bebiendo de fuentes tan dispares como la música barroca, el neoclasicismo y el Death Metal, PARADISE LOST logran crear un sonido que resulta fresco, apasionante y nuevo al mismo tiempo. Ralentizan los ritmos avasalladores y brutales del Death Metal, pero sin abandonar sus principales características: la oscuridad, las voces guturales y una producción semejante a grabar en una cueva rodeado de restos del Neolítico.
Es una época dorada para el Black Metal, que empieza a surgir como punta de lanza en los países Nórdicos; es la época de la quema de iglesias y los conflitos pseudo políticos en Noruega que llevaron a la condena a VARG VIKERNES (BURZUM). Cientos de grupos comienzan a gestarse y a impregnar su música de un sentimiento nihilista y autodestructivo que a la postre se convertiría en movimiento comercial y de moda, llegándose incluso a la autoparodia.
El Thrash Metal da sus últimos coletazos y comienza a transformarse en un Heavy Metal empalagoso de capa y espada que poco o nada tienen que ver con sus orígenes...
Y en todo este caldo de cultivo surgen PARADISE LOST con su demo MORBID EXISTANCE (demo de un solo tema de ensayo que fue grabado para mandarlo a fans y fanzines de la época) y la homónima autoproducción PARADISE LOST (1988), a las que siguen las algo más elaboradas PLAINS OF DESOLATION y FROZEN ILLUSION (1989), que son prácticamente el preludio de su primer álbum LOST PARADISE. Grabado en los míticos estudios THE ACADEMY con la producción de HAMY (otro mítico en el doom), LOST PARADISE cuenta con las voces femeninas de KEY FIELD. El sonido del disco es críptico, oscuro y decadente, sentando las bases del género. Las intervenciones de Key Field son todo lo contrario a lo que se lleva hoy día en cuanto a voces femeninas: espectral y soñadora...
LOST PARADISE suena a death metal tocado a medio tiempo, impregnado de las profundas voces de un Nick Holmes en estado de gracia y con unos riffs de guitarra del señor Mackintosh que sólo pueden calificarse de sublimes. Toques de teclado en la Intro, la onírica BREEDING FEAR y la brutal ROTTING MISERY son ya himnos para la historia.
Movamos ahora un poco nuestras coordenadas en la misma Halifax para situarnos en el local de ensayo de otros jovencísimos músicos. MY DYING BRIDE surgen de la podrida Inglaterra con la demo TOWARDS THE SINISTER (1990), que contaría con la mítica formación de Aaron (voces), Andy (guitarras y teclados), Rick (batería) y Calvin (guitarras), formación que permanecería estable durante bastantes años gestando un sonido tan personal y característico, a la vez que maduro y progresivo, que los encumbrarían a todo lo alto del olimpo del Doom. Ya se incluye en esta demo en cassette totalmente autoeditada la mítica SYMPHONAIRE INFERNUS ET SPERA EMPIRIUM en una primera y seminal versión.
MY DYING BRIDE suenan depresivos... muy, muy depresivos. En ocasiones a uno se le viene a la mente que quizás estos músicos nunca han visto la luz, y es que es difícil imaginarse como se puede crear una música tan retorcidamente oscura y brutal.
Los parámetros musicales de PARADISE LOST se repiten en MY DYING BRIDE y las similitudes entre ambos son quizás las más evidentes dentro del Death/Doom británico, al menos en sus comienzos. En 1991 editan el single 7" (limitado a 1000 copias numeradas a mano) GOD IS ALONE con LISTENABLE RECORDS.
En 1992 fichan con la mítica PEACEVILLE RECORDS para editar el 12" single SYMPHONAIRE INFERNUS ET SPERA EMPIRIUM, que ya cuenta con el distintivo sonido made in MY DYING BRIDE: un retorcido, depresivo y barroco death metal con toques decadentes de la música gótica que los hacen prácticamente únicos en la escena.
Otro aspecto a destacar es el artwork en las producciones de MY DYING BRIDE. Las extrañas y surrealistas portadas de su vocalista Aaron Stainthorpe van de la mano con las portadas del mítico autor inglés DAVE MCKEAN uno de los principales ilustradores y diseñadores de Gran Bretaña, iniciándose una colaboración entre grupo y artista que duraría durante varios trabajos.
La tercera pieza del puzzle del sonido doom/death británico se sitúa en Liverpool. Con el primerizo nombre de PAGAN ANGEL, Darren White (voces), Daniel Cavanagh (guitarra), Vincent Cavanagh (guitarra), Jamie Cavanagh (bajo y voces) y John Douglas (batería) forman la primera encarnación de ANATHEMA. Su primera demo con el nombre de ANATHEMA es AN ILLIAD OF WOES.
En formato cassette y autoproducida, esta primera grabación nos muestra a un grupo crudo y primitivo, muy enclavados en un death metal tocado a medio tiempo pero con las semillas de lo que vendría después. La suciedad del sonido en esta primera demo entorpece enormemente la escucha pero la calidad es innegable. Los característicos riffs de guitarra que podrán escucharse en posteriores grabaciones están en la primera encarnación del tema MEMENTO MORI, o en ECHOES OF TERROR y su bestial guturalidad.
1990 nos muestra ya a unos ANATHEMA más evolucionados en su demo también autoproducida ALL FAITH IS LOST. Aquí tenemos prácticamente el sustrato sónico que derivará en su primera grabación con PEACEVILLE RECORDS: el ep CRESTFALLEN, que cuenta con la incorporación de DUNCAN PATTERSON al bajo sustituyendo al tercer hermano CAVANAGH.
La enigmática portada de CRESTFALLEN nos sumerge en una grabación épica y nostálgica a partes iguales... toda una oda al desamor, la nostalgia y a los familiares desaparecidos. AND I LUST suena como un cántico a los fenecidos, THE SWEET SUFFERING una oda al pasado, la vocalista RUTH pone los vellos como escarpias en EVERWAKE, CRESTFALLEN épica como una depresión otoñal y THEY DIE tan alegre como una lápida cubierta de flores muertas...
Al mismo tiempo que la edición de CRESTFALLEN, se pone a la venta un single 7" con WITCHHUNT RECORDS con versiones ligeramente distintas de los temas THEY DIE y CRESTFALLEN... el preludio de su primer larga duración estaba ya más que servido.
FIN DEL PRIMER ACTO.
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