En ocasiones me pregunto de qué material están hechos gente como
Miguel Navarro de
ALONE RECORDS. Qué les motiva a lanzarse prácticamente al vacío sin saber qué manos van a recogerlos del suelo.
Sin duda alguna se trata de gente hecha de una pasta especial, más dura, más loca, más creativa... no sé, en cualquier caso escuchar sus reveladoras palabras en el encuentro que tuvo ayer en el bar LA CENTRAL de Málaga (y que abría el paquete de actividades para la celebración del 15 aniversario del sello) tuvieron una pátina de (tristeza o nostalgia?) emoción que le hacen a uno plantearse muchísimas cosas.
Quizás la parte final de la charla tuvo ese deje de esperanza apocalíptica en la que uno cree que las sensaciones que vivió de adolescente se perpetuarán hasta el infinito siempre que haya gente como Miguel dispuestas a dejarlo todo por llevar un proyecto como Alone adelante.
Apretando el huevo derecho contra el izquierdo, Miguel se revela al sello que maltrató promocionalmente a ZONA PÚRPURA para sacar de la nada (sí, de la nada) un sello discográfico. Estas y mil cosas más se hablaron en el reducido aforo que asistió a la charla... porque seamos sinceros, Málaga está podrida culturalmente hablando.
Basta meter las narices en cualquier bareto del centro, investigar el nauseabundo mundo de las subvenciones de la Junta de Andalucía y mil y una cosas para darse cuenta de algunos aspectos de interés... pero se nos olvida uno fundamental. LA PASIÓN con la que se movían estas cosas hace 15 años; y evidentemente, al igual que Miguel, creo que los degustadores de música metal, stoner, doom o lo que sea pues no son los mismos ahora que antaño.
Ya ya no hablemos de la ausencia de los popes de la información en Málaga a nivel cultural. Olvídense ustedes de periódicos, corresponsales, suplementos de revistas y cosas así. Y si los hay, son los reyes del corta y pega. Esto es la realidad, pese a quien pese.
Sacrificio es la palabra. Los hay que quedan con ramalazos de aquella pasión que movía cosas (con más o menos pelo, más o menos peso) y los hay que han sido subyugados por el infame mundo de la tecnología hasta para cagar.
Y sin pasión no asistes a charlas como esta, claro está... sin pasión no guardas una caja llena de posters, recortes de periódico amarillentos y entradas de conciertos que fueron tu base, tu adolescencia y tu paso a la madurez (tanto humana como musical).
Ver en una pared de EL ATENEO las sesenta y tantas portadas de las ediciones que ha sacado ALONE RECORDS estremece. Más cuando se contaron anécdotas de las portadas, de las ediciones, y de los diseñadores, algunos de los cuales estaban por allí... por ejemplo ANTONIO RAMÍREZ, que presentó dibujo ("La Gran Mentira") homenaje a GRAN PODER de ORTHODOX, banda que comparte muchísimos aspectos morales, humanos y pasionales con Miguel, y auténtico buque insignia del sello.
Porque la gente de
ORTHODOX ama la música. Se nota en cada uno de los proyectos, en cada uno de los conciertos (con cualquiera de sus múltipleses encarnaciones) y charlando con ellos. No con los músicos, sino con las personas detrás de los instrumentos.
El concierto que ofreció MARCO SERRATO en una sala del ateneo presentando cortes de SEIS CANCIONES PARA CUERVO no fue apto para todo el mundo, pero puedo asegurar que los que estaban allí conectaron con el brutal diálogo intimista que Serrato le imprime a su contrabajo.
Un contrabajo que nos habla de lo más profundo de Serrato como persona, manifestándose mediúmnicamente a través del Serrato músico.
No es lo mismo oír que "ver" la improvisación libre y proyectos tan arriesgados como este... creo que deben ser casi complementarios. Ver el bamboleo de la cuerda sin tensión del contrabajo cimbrearse al ser acariciada por el arco estremece. Como también estremecen los sonidos que asemejan voces y lamentos. Chirrios, chasquidos, música de cámara y avant-jazz. Para mí una delicia.
El plato fuerte estaba por llegar. ORTHODOX presentando AXIS (cuya portada de Gonzalo pudo verse en la exposición) con invitados de lujo: Aquileas Pó de SKULLFUCK al saxo del inframundo y Cárlos Pérez de MONSTERMIND.
Describir a estas alturas a Orthodox en directo es casi pecado capital. Una de las experiencias más brutales que te puedas echar a la cara. Algo primitivo, forjado en hierro, con trazas de Venom, Manowar y Bathory a partes iguales en su parte inicial del concierto, para luego tocar las panderetas de nuestras membranas timpánicas con una brutal jam con Aquileas Pó al saxo y acoples.
Los temas nuevos sonaron muy prometedores y los antiguos me parecieron tocados a un tempo algo más lento con la guitarra de
Carlos Pérez. Aquello era como una locomotora cuyo motor indiscutible es la poderosa batería de
BORGO DÍAZ... una bestia parda al instrumento con una batería naranja que suena a dioses eyaculando.
Espero ansioso la salida de AXIS. No puedo ser objetivo, lo siento.
ALONE RECORDS y
ORTHODOX son parte importante en mi vida como oyente, fan y amante de la música. Por ello me pareció una fecha inolvidable, llena de momentazos y que espero se repita dentro de otros 15 años.