Cuesta expresar con palabras la multitud de sensaciones diferentes que sentí cuando escuché por vez primera tan magna obra. Orphaned Land eran por entonces (allá por 1996) un desconocidísimo grupo de death/doom israelí con apenas una demo (The Beloved Cry) y un album (Sahara) con poca trayectoria fuera de sus fronteras.
Con las vicisitudes propias de ser un grupo de doom en Israel, en una época en la que no era tan fácil como ahora promocionar tu música y en la que el intercambio de música prácticamente se hacía mediante cassetes, Orphaned Land supieron destacarse de otros grupos del estilo aportando sus raíces propias de la música hebrea y árabe y fusionándolas magistralmente con la visceralidad del death/doom.
El Norra Alila destaca por sus ambientes oscuros y opresivos, y es que a veces tienes la sensación de estar escuchando a unos Paradise Lost de su primera época fusionados con la llamada a la oración de los muezzines... Editado en 1996 por la discográfica francesa Holy Records (toda una leyenda de la vanguardia en la música extrema), y tras su enigmática portada, destaca para mí sobremanera un tema que todavía me pone los vellos de punta: El Meod Na´ala... de verdad que no sé cuantas veces lo habré escuchado.
Lejos estaban todavía los tiempos de obras de culto como Mabool o The Never Ending Way of Orwarrior pero ya se entreveían retazos de lo que estaba por llegar. Tras éste disco un paron de 8 años en los que poco se sabe sobre la banda, salvo que algunos de sus miembros estaban realizando el servicio militar israelí... y después Mabool, pero eso ya es otra historia...
Con las vicisitudes propias de ser un grupo de doom en Israel, en una época en la que no era tan fácil como ahora promocionar tu música y en la que el intercambio de música prácticamente se hacía mediante cassetes, Orphaned Land supieron destacarse de otros grupos del estilo aportando sus raíces propias de la música hebrea y árabe y fusionándolas magistralmente con la visceralidad del death/doom.
El Norra Alila destaca por sus ambientes oscuros y opresivos, y es que a veces tienes la sensación de estar escuchando a unos Paradise Lost de su primera época fusionados con la llamada a la oración de los muezzines... Editado en 1996 por la discográfica francesa Holy Records (toda una leyenda de la vanguardia en la música extrema), y tras su enigmática portada, destaca para mí sobremanera un tema que todavía me pone los vellos de punta: El Meod Na´ala... de verdad que no sé cuantas veces lo habré escuchado.
Lejos estaban todavía los tiempos de obras de culto como Mabool o The Never Ending Way of Orwarrior pero ya se entreveían retazos de lo que estaba por llegar. Tras éste disco un paron de 8 años en los que poco se sabe sobre la banda, salvo que algunos de sus miembros estaban realizando el servicio militar israelí... y después Mabool, pero eso ya es otra historia...
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