HAIKU FUNERAL - "DROWN THEIR MOONS IN BLOOD" (AESTHETIC DEATH ADCD 084, 2021)

Escribir sobre HAIKU FUNERAL no va a ser fácil porque su música no lo es precisamente. Angulares, de base industrial pero sin perder la esencia del Doom más underground que se empezara a pergeñar a partir del año 2000 con bandas con algún acercamiento similar (nunca igual) como los míticos canadienses Zaraza, Wraith of the Ropes, Torture Wheel, algo de Dispersed Ashes y los multi proyectos de Stijn Van Cauter de Until Death Overtakes Me. Bien... cierto es que Haiku Funeral beben de muchísimas más fuentes y sin ir más lejos, sus operísticos y bombásticos temas tienen un tono bastante ritual y parcial, con base fuertemente anclada también en esos sonidos ultranihilistas del Black Metal que se estila en sellos como Crucial Blast (Gnaw their Tongues, Ramleh, Theologian y muchísimos más).

El dúo francés compuesto por Dimitar Dimitrov (electrónica, voz y teclados) y William Kpecky (bajo, voces y sitar) empieza su andadura allá por 2009 con Assassination In The Hashish Cathedral al que seguiría en el mismo sello If God is a Drug (2010), ambos en el oscurísimo sello danés Hikikomori Records. En esta etapa los conocí por temas sueltos pero tampoco puedo comparar demasiado lo que hacían antes ya que excepto este último que hoy os presento Drown Their Moons in Blood y su magnificente doble anterior, Decadent Luminosity (2018), nunca he podido conseguir nada más de ellos a pesar de que en 2012 fichan por AESTHETIC DEATH, discográfica con la que continúan hasta la actualidad sumando a los anteriormente citados los para mí desconocidos (no se puede abarcar todo) Nightmare Painting (2012) y Hallucinations (2016).

Al dúo principal suelen acompañarle una plétora de músicos bastante sugerente, siendo en esta ocasión Graig Walkner a la batería y percusión (en dos cortes) contraviniendo un poco el espíritu coral que desplegaron con el doble anterior (contaron con saxofón, bajo freetless e incluso violín) pero ojito que Drown Their Moons in Blood es igualmente hermético, oscuro y a trozos grandilocuente. Grabado en Daemonicreation Studio (Marsella) entre 2018 y 2021, posteriormente pasa por la batuta mística de Greg Chandler en sus Priory Recording Studio. Por cierto, fantástica toda la imaginería del artwork del digipack a 6 paneles con extenso libreto incluído.

Salvando las distancias y de modo general, imaginad a los Bong desarrollando su música sobre bases electrónicas e industriales (no en vano el sitar recuerda muchísimo al Shahi Baaja). Tempos muy lentos y atmosféricos tiñendo de cierto aire cinematográfico los 60 minutos del álbum, abre (vaya pedazo de título) "The Universe Murders Itself"; sintetizadores y pads cósmicos y etéreos, que más o menos se van a mantener durante todo el minutaje, van siendo arropados por arranques de percusión electrónica y místicos cantos. El conjunto ultra triposo, lisérgico a más no poder y reforzado por vaivenes con regusto oriental son una auténtica pasada, arrastrando todo el conjunto dentro de un entramado post apocalíptico de calado chamánico. Cuanto entran las voces (imperativas y homiliescas) es cuando te acuerdas de Laibach y por ende de aquellos impresionantes y olvidados Zaraza o del multi como all star The NULLL Collective. 

Pero ojo que la apertura del disco podría llevar a engaño. Hay Dark Ambient y música Industrial, pero es escuchar el sitar en "The Head of the Innocent One" y adquirir el conjunto un espíritu mucho más orgánico y distinto... no sé si controláis los últimos discos electrónicos de los míticos Canaan, pero si los cruzas con Bong puede dar como resultado algo similar. La guitarra hace acto de presencia con riffs muy distorsionados (guitarra no hay, así que imagino que serán sintes) de base Funeral, y tanto este corte como el siguiente canto en cirílico, "Cherny Shamani / Черни Шамани" forman un brutal díptico con la batería real de Craig Walkner que, cuál es mi sorpresa, toca en la banda Far Out en estilo totalmente distinto... Rock en Oposición y con discos en el sello de culto Cuneiform. 

Descomunal la base rítmica, la forma arrastrada de aletargar ambos temas y las crípticas voces a medio camino entre el susurro y lo gutural (además de esos interludios ambientales con cánticos a caballo entre lo monástico y lo mediúmnico). A estas alturas el estado de trance equivale a 7 orgasmos seguidos de Aleister Crowley, y purgado de mis desechos mediante `enemas del alma´, afronto la magnificente "The Earth Burns and Burns", puro Dark Ambient cósmico como unos Popol Vuh enfermos, bastardos y teratogénicos abriéndose en abanico mediante Spoken Word. 

Haciendo un inciso, hay elementos que me recuerdan a los también franceses CAMECRUDE que reseñé por aquí, especialmente en los malsanos clímax hipnóticos que van derramándose como óleo putrefacto a mitad de tema y unas letras de órdago ("Vortex of teeth / in the blood-stained air / music of the pure / in raped corridors / cyclopian sickness in the garden / the earth burns and burns"). Sigue "Split the Swollen Dark" discurriendo por sendas algo más minimalistas y contemplativas (casi drum n´ bass con Ambient), cuyo reverso tenebroso es "To Illuminate a World", de inicio comedido y largo periplo instrumental hasta que aparecen las voces susurradas. 

Acoples, drones y sábanas de sonido luciferino allanando el terreno para ese incomensurable himno que cierra el disco por todo lo alto... "Drown their Moons in Blood", asalto a mano armada a tu mente con estructura de himno de batalla. Intro a base de fabulosos y marcados toques del sitar y el bajo dragando cualquier posible molécula de oxígeno de tu cuerpo y llevándote de la mano a una planice donde todavía se practican antiguos ritos sumerios. Escalas orientales mezcladas con bases industriales y algún regusto pseudo-bailable (¿existían las discotecas EBM en Mesopotamia?.... lo digo porque el ambiente gótico que meten las voces limpias son una auténtica pasada.

MUY RECOMENDADO. Para mí, una joya.

https://www.aestheticdeath.com/releases.php?mode=singleitem&albumid=5243

https://haikufuneral.bandcamp.com/

SIMÓN DEL DESIERTO - "AVOID" (DISCOS HEREJES / IMBUNCHE RECORDS / VERTEBRAE, 2021)

¿Sabéis esa textura que cogen los cactus cuando se están pudriendo por exceso de agua?. Se ponen de color oliváceo mortecino, abotargados como un convaleciente en anasarca y cuando se los mueve un poco se les nota a punto de desprenderse del tronco. Suelen revolotear pequeños insectos que sacian su sed con el verdín putrefacto y estancado de una planta que es incapaz de hacer la fotosíntesis por puro agotamiento; vale... ahora intenta untarte esa masa verde en una rebanada de pan, espinas y todo y para adentro. Así es como quiero definir el sonido (no el lugar que eso siempre da lugar a errores) de la escena Doom de Maryland de los Revelation, Unorthodox (Nashville), Penance (Pittsburgh, Pennsylvania), Lost Breed (California) y otros entes que aun no siendo americanos los suelo meter (quizás equivocadamente) en el mismo saco como los Mirror of Deception.

Como si tocaran desangelados, ultra arrastrados y cargados de ese rock desértico primerizo de dioses como Yawning Man, se trata de un Doom tradicional cargadísimo de sol (suelo visualizar una playa apocalíptica con un David Hasselhoff convertido en brasas incandescentes montando en una tabla de salvamento de color morado con una cruz grabada). Si más o menos has comprendido esto quizás estés en el contexto cerebral adecuado para adentrarte en los madrileños Simón del Desierto, banda que vi nacer con su ep Ursaria (pillé la edición con el parche molón) allá por 2016. Tengo que reconocer que desde entonces y por sobreexceso musical no había vuelto a tener contacto con ellos y el siguiente Purgatory (2018) ya sin la presencia a las voces de Carmen (también tocaba los teclados) no  lo he escuchado.

Lo que sí os puedo asegurar es que su último Avoid va a hacer las delicias del decrépito oyente si estás en la misma longitud de onda que yo. La formación se mantiene con Javi a la batería (de otros que tal bailan, los Misty Grey o los culto mongers Dispain y Rizoma que el Dios Tubérculo los tenga en su gloria), Julio a las guitarras / bouzouki (también Dispain) y las voces de (Gustavo que tiene en su currículum a los brutales Arropiero que reseñé por aquí, además de guitarras o voces aquí y allá en Lords of Bukkake, Cuerno...). Sigamos con los detalles técnicos. Avoid se graba en Estudios Brazil con masterización de Javier Ortiz (2019) y se edita en CD y Lp por Discos Herejes, Imbunche Records y Vertebrae (que tiene un fondo de catálogo que me flipa). Artwork sugerente y Buñueliano de Daniel Luna Sol y bueno, vamos con la música.

Hablaba yo de cactus en proceso de retorno a la masa madre... bien; el Doom tipo Maryland se caracteriza por una poderosa sensación de minimalismo donde es clave la sensación de vacío, hueco o algo así como si te faltara un instrumento. Puede fliparte el Tradicional o Heavy Doom, el Doom/Death y cosas así, y sin embargo odiar a bandas como Revelation... lo que digo, tienes que vibrar en la misma longitud de onda y conformarte con una guitarra que suele asumir también el rol de acompañamiento de la batería (efectivamente, no hay bajo) así que el minimalismo es muy importante. Por tanto, lo primero que tiene que funcionar en Simón del Desierto es la guitarra y efectivamente, FUNCIONA. Riff tras riff tras riff ultra fuzzero y cargado de una distorsión psicodélica desértica pero afortunadamente NO Stoner. El virtuosismo aquí no es lo importante sino la atmósfera decadente tal y como queda en evidencia en la fabulosa "In Dream Paleness" que denota un regusto bluesero inclusive (con pasaje a lo Cathedral). La batería, sin trampa ni cartón, arropa todos los registros y suena ultra orgánica (¿he dicho que el Doom de Maryland es biodegradable?).

Siguen los 7 minutazos de "Meaning of Existence", que se desliza oleosamente con esa lenta pulcritud rockera de unos Blue Cheer y MC5 a los que antes de tocar se les hubiera drogado con una dosis excesiva de opiáceos y el bajista no hubiera podido salir a escena. Para mi gusto, la voz de Gustavo es más acertada que la femenina porque corta de raíz cualquier atisbo de Epic Doom y cosas por el estilo que no es que sea malo en sí, pero insufla más caldo añejo al asunto. Sin efectos bombásticos pero sí tirando de algún que otro truco de pedaleras para deformar la realidad en pátinas lisérgicas, me atrevo a decir que la banda ha crecido una barbaridad desde aquel Ursera. Sincopada y cabalgante "An Interrupted Silence", subiendo un pelín el tempo y con un trabajazo de batería que recuerda a las bastardadas de Rizoma y su Agro Rock o los devastadores y añorados Dispain. 

Pero ojito que la cosa todavía mejora en "Into the Full Void", de largo inicio instrumental, voces dobladas y unos arreglos del bouzouki griego en plan Doom Folk que ponen los vellos de punta. Las voces a lo Lee Dorrian pasado de vueltas otro acierto y no hago más que preguntarme por qué el disco solo dura 31 minutos. Sensación de despegue percusivo en la ácima "Lies" que parece sacada del catálogo más oscuro de Rise Above (Sabbath a tope); descenso a los infiernos plúmbeos a mitad del corte aletargando todavía más el tempo y con la voz cargada de eco... y qué maravilla como se construye todo con guitarra y percusión, mas una voz que sin ser virtuosa (ni falta que hace) modula y cambia, permuta y agoniza... susurra y te sopla el aliento en el oído. "Maneras de Morir" resume todo lo anterior, añade voces con vocoder y completa una gozada de álbum abrazando tangencialmente el Space Rock.

Madrid empieza por M, al igual que Maryland.

https://simondeldesierto.bandcamp.com/

MONDO PODRE - "NECRONOMÍA DE SUBEXISTENCIA" (Finte Platten, Aktiver Ausstand In Plastik, minoRobscuR, I Don't Give a Fuck, Colectivo Bilis; 2022)

Desde Galicia se me pusieron en contacto MONDO PODRE creo que, si no me equivoco, a raíz de la reseña del brutalífico zine I DON´T GIVE A FUCK además de que viendo los agradecimientos del libreto por ahí pulula gente ilustre como Miguel Souto (Sudaria, Suspiral...). Bueno, a lo que vamos... Mondo Podre se forman hace 6 años sacando Alive an Undead in Vigo, Split con los brasileiros Surra al que siguen una Demo y el consabido Ep hasta llegar a este tremendo Necronomía de Subexistencia, 14 cortes en 20 minutos que transitan desde un abigarrado Brutal Death a un Grindcore con trazas Crust en toda la jeta, pasando por pasajes ultratécnicos e incluso algún arrebato avantgarde y es que al contrario que otras bandas del género (vease el Porno Grind y demás), nada más tienes que ver ese logo de la banda aunando tecnología con raíces herbáceas para intuir que lo suyo es una especie de mezcla de Tetsuo con documental de El Hombre y la Tierra versión social (mas algún ramalazon Black en las bases rítmicas y algunos arranques vocales).

Investigando el asunto, pues resulta que la masterización (tras grabación en Estudios Cumbre) es del propio Miguel Souto y el apabullante artwork de Ars Erinyos, reduciéndose la formación tras algún que otro cambio a Espasa (bajo), Damián (batería, ex Desolate, ex Infrahumano), Dani (voces, también en La Hija del Carroñero) y Gon (guitarras, también en Akouphenom, Cruzeiro y algunas bandas ya extinguidas como Bokluk, que tuvieran conexiones con Lóstregos y Wardead).  Resumiendo: gente curtida ya en la escena norteña y que si no me equivoco andarán detrás de algún modo de la Sala Asatru, el Colectivo Bilis o el propio zine I Don´t Give a Fuck, ambos distribuyendo tanto el Cd como la reciente edición en LP en la que colaboran también Finte Platten, Aktiver Ausstand In Plastik y minoRobscuR , ultra oscuros sellos de Grind, Hardcore y Punk germanos (desconozco cuál es la conexión con Alemania en este asunto).

En cuanto al sonido lo primero que tengo que decir es que si fuera simplemente Grindcore probablemente no estarías leyendo esto porque no es un género que de por sí me llene ahora bien, Mondo Podre tienen los suficientes atisbos de originalidad y de salirse por la tangente como para que lo lleve poniendo en bucle todo el verano. Desde esas cabalgadas infectas a lo Mortician a pasajes muy técnicos (sin olvidar por supuesto a Carcass, Napalm Death o Anal Cunt), Mondo Podre denota una claridad de ideas alucinante desde esa ultra corta pero excelente apertura machacona de "Market Panopticon", a dos voces y con cierto aire Thrash pero rehuyendo de un estilo que ya me repele que es el Grind Crust de índole social tocado sobre todo en Sudamérica que no es que no me guste, sino que está tan trillado que generalmente no consigue llamar mi atención. "Esperando Demasiado Tiempo para Acabar igualmente en el Infierno" es una ordalía de base rítmica ultra barroca y unas voces guturales subrayadas con los `shrieks´ propios del género y lo que es mejor, caídas plúmbeas del tempo para bucear en terrenos del Old School Death de primeros Autopsy y cuidadito con "O Cadáver Negro do Sol", con todos los instrumentos perfectamente audibles y unas letras demenciales; la música es una mezcla entre Celtic Frost ultra acelerados versus Cryptopsy (vale, sé que es raro, pero a mí me suena así) y las letras no tienen desperdicio:

"Deixade os buracos de crú. A nosa entidade dirixe a YIHAD.

A insumision pagarase coa sangue das sua xentes.

Guerra autonoma!

Corpo desfigurado da Antiga Persia

Preparando a insurxencia contra a hexemonia do impeiro solar.

O cadaver negro do sol espia a humanidade camiño da extincion.

Morte.. vida... nada vale mais que a nosa propia avaricia".

Cambia un poco el tercio con los 56 segundos de "Devorados polo Kippel" con inicio a lo Brujería (esa música que te mece) y otra vez letras soberbias: "Cabichas, plástico e metal corroido a moreas nas ruínas. O mundo post-antropoceno parecerase á casa dun ancián demente". Se van sucediendo machacones himnos como "El Arte de lo Inútil", "Baixo a nube de Hiroshima" o esa apocalíptica y con mención al Warhammer "La Guardia de la Muerte" con una batería que se sale, además de retorcerse junto al bajo en juegos intrincados que zurcen pasajes que vuelven a bajar el ritmo hasta rozar el Death/Doom). Mondo Podre son capaces de abrir todo un mundo de posibilidades a pesar del escaso minutaje de algunos cortes, buceando entre mugre Thrash y asfixiantes anticlímax en los que la guitarra muestra una técnica absolutamente endiablada. Con todo, el Crust Punk sigue presente en "Dona tus Riñones al Banco" que además, y durante lo que se me antoja menos de dos segundos, parece que va a arrancarse por un pasaje Black Metalero antes de que entre el mini tajo "Je Suis la Merde".

De aquí al final todo un catálogo extremo donde resaltan cambios de ritmo a lo Voivod (versión Grind) en "Circo Geriátrico" (flipante las voces guturales) que se funde con la filosófica pedrada "Escravos da Mediocridade" plagada de angulares guitarras tejiendo un caleidoscópico fondo sobre la que cabalga una incansable base rítmica. Intenso, muy intenso ("Mileurista Grindset"), Hardcore, muy Hardcore ("Estado de Excepción no Declarado") y adictivo, muy adictivo ("Oio Voces que Queren Queimarme" con regusto sueco Carcassiano un fundido al añejo Doom cuasi Coffins que quita el hipo).

MUY RECOMENDADO. MUY RECOMENDADO.

https://mondopodre.bandcamp.com/music