Total, que siempre digo lo mismo y acabo destrozado, pero la ocasión merece la pena, máxime cuando FANCINE cumple 25 años. Como saben los 0,3 lectores que leen ocasionalmente este blog (generalmente en años bisiestos y bajo el influjo de la ayahuasca), acudo como reportero de prensa (muy humilde, muy poca cosa, pero muy contento con lo que tengo) a torturar mi circulación en la zona coxígea, dinamitar con ácido mi estómago y ejercitar muscularmente mis párpados (no sabéis lo que pesan a determinada hora de la madrugada los malditos trozos de carne de pandereta).
Pues como quien no quiere la cosa, comienza el asunto:
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TALE OF TALES (MATTEO GARRONE; ITALIA, 2015)
El bueno de Garrone se nos suaviza un poco y nos trae tres lindas fábulas grotescas muy alejadas de propuestas menos grandilocuentes como lo eran GOMORRA (2009) o REALITY (2012); debut a la dirección en habla inglesa puesto que las anteriores habían sido en su idioma natal.
De una factura técnica altísima, y con un plantel de actores tremendo (muy buenos papeles de Salma Hayek, el camaleónico Vincent Cassel, Toby Jones....), sin embargo la cinta transcurre a un lentísimo ritmo que induce al sueño.
El ambiente fabulesco de viejas leyendas bizarras está presente pero el problema radica en lo excesivamente alargado de las historias, que se van alternando para unirse levemente en un final con muy poco clímax y chicha narrativa. Y claro, esto acaba poniendo una mortal losa encima de TALE OF TALES, que acaba dejándola en un inferior segundo plano a pesar como digo de lo trabajado de la escenografía, el buen trabajo de cámara, etc, etc.
Quizás meter alguna historia más le hubiese dado algo más de profundidad al asunto, porque cuando uno termina la película tiene la sensación de haber asistido a un desfile de cuentos crueles supuestamente teñidos de la belleza épica de los cuentos de antaño (que no olvidemos que eran hechos para asustar); por desgracia, no todos los cuentos funcionan y con algunos incluso te duermes.
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LANDMINE GOES CLICK (LEVAN BAKHIA; GEORGIA; 2015)
LEVAN BAKHIA, director director proveniente del Cáucaso, ya tuvo su debut con la muy poco notable 247ºF. En esta ocasión nos trae a un grupo de turistas americanos en plena naturaleza Georgiana, y con la particularidad de que uno de ellos pisa una mina antipersona.
A partir de aquí, se construye un thriller muy alargado (otra vez dos horas de metraje) que transita entre el puro cine de supervivencia al principio y el thriller psicológico cuando irrumpe un magnético KOTE TOLORDAVA, del que me he encontrado la sorpresa de que murió el pasado Abril.
Tolordava fue encontrado muerto en una habitación de hotel en Moscú, donde iba a grabar una nueva película; una lástima, porque realmente es lo que más sobresale del film
El suspense mantenido durante hora y pico se va por el retrete cuando el director de una película no sabe como terminarla. Es el caso de LANDMINE GOES CLICK creo.... y digo creo porque en la era digital de discos duros y alta definición también fallan las cosas, y al menos los 15 últimos minutos nos tuvieron con un desagradable salto de pantalla, que inevitablemente condujo a la suspensión de la proyección.
Entre salto y salto perdió fuelle el asunto y por lo que pude ver la cosa iba de venganzas pasadas de rosca. Sinceramente me estaba entreteniendo bastante, pero la inverosímil vuelta de tuerca vengativa de STERLING KNIGHT no hay quien se la crea.
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NI LE CIEL NI LA TERRE/THE WAKHAN FRONT (CLÉMENT COGITORE; FRANCIA, 2015)
Tras una serie de cortometrajes, CLÉMENT COGITORE se mete de lleno en el largometraje con una claustrofóbica historia de un grupo de soldados franceses en pleno valle de Wakhan en Afganistán.
He visto muchísimas películas que mezclan el cine bélico con el terror (DJINNS, DOG SOLDIERS...), pero la verdad es que hasta ahora no había encontrado una que me dejara literalmente pegado al asiento. Terror psicológico en su estado más puro, con una amenaza que viene tanto de lo terrenal y bélico como de lo puramente psicológico, religioso y espiritual.
Personajes que se ven al límite de sus fuerzas psíquicas cuando lentamente van desapareciendo sin dejar rastro, el problema se intensifica cuando las fuerzas afganas también empiezan a ver mermadas sus líneas.
Reforzada con una excelente banda sonora, y unas sobresalientes interpretaciones (Jérémie Renier en el papel del capitán Antares Bonassieu), no será esta película plato de buen gusto de los que gusten de sobresaltos, historias cerradas y películas visualmente atractivas.
La principal virtud de THE WAKHAN FRONT es darte de lleno con un terror psicológico potenciado por una sensación de realidad destilada gota a gota y fotograma a fotograma. Sutil, sin mostrar demasiado, y con mucho cine de autor que se aleja del cine fórmula.
O te gusta o no te gusta, no creo que haya demasiados términos medios.
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THE LOBSTER (YORGOS LANTHIMOS; GRECIA, 2015)
Plato fuerte con la nueva película del griego YORGOS LANTHIMOS. Tras CANINO (2009) y ALPS (2011), es el turno ahora de una distópica cinta de amor con trazas de humor negro que en ocasiones rozan los aspectos más oscuros de los Monty Python (que los tenían, y mucho).
Una sociedad en la que determinadas reglas dividen a la población entre "solteros" o "casados", de tal suerte que a los solteros se les envía a un sitio donde necesitan encontrar pareja antes de 45 dias, so pena de verse convertidos en animales.
El cine de Yorgos Lanthimos es lacónico, tenso y surrealista, y uno tiene la sensación durante todo el film de que está jugando en una meta-realidad que es puesta en la pantalla a base de fotogramas ásperos, líneas de diálogos cargadas de ironía y una profunda sensación de crítica social soterrada.
Destaca sobremanera un excelente papel de COLIN FARRELL y RACHEL WIESZ, al que se unen Ben Whishaw, Olivia Colman, Léa Seydoux, John C. Reilly, Roger Ashton-Griffiths, Ashley Jensen, Michael Smiley, Jessica Barden....
Poco más que decir. THE LOBSTER tiene que ser juzgada por cada espectador. Para mí, una excelente muestra del extraño y bizarro mundo del director de aquella obra maestra que fue KYNODONTAS; si bien ALPS me dejó algo frío, vuelvo a encontrarme con ese maravilloso mundo poblado de nieblas donde puede pasar cualquier cosa, por rara y utópica que nos parezca.
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Estas fueron mis cuatro películas de ayer; en la Sala 2 empezaba la retrospectiva LYNCH con TERCIOPELO AZUL, una retrospectiva que el Albéniz está poniendo a trompicones año tras año y que me parece incompleta, pero bueno, eso son asuntos personales.
Por otro lado ZATOICHI, THE RING y la tremenda WE ARE STILL HERE, que tuve ocasión de ver hace unas semanas y de la que hablaré en unos días.
Mañana más.
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