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domingo, 31 de octubre de 2010

INMENSA MÁLAGA 2010


Ayer pude disfrutar en el Teatro Echegaray de Málaga de una velada de buena música a cargo de algunos de los grupos con más exito de los últimos años en la escena musical patria.

Si la iniciativa está a cargo como siempre del sello Alone Records y de Miguel... la calidad está asegurada. Además si tenemos en cuenta la calidad de sonido de la que disfrutaron los grupos y del buen ambiente que reinaba en la sala, pues ya tenemos los ingredientes a punto para disfrutar a tope:

EL PÁRAMO


El Páramo se presentan como primer grupo de la noche sustituyendo a los malagueños Tom Cary (que la verdad todavía no he escuchado); para mí toda una sorpresa porque no tenía ni idea y la verdad es que tenía ganas de ver a El Páramo en directo.

Sonidos desérticos y polvareda ambiental; lisergia y guitarras ácidas para un grupo que merece sacar ya un segundo disco para demostrar de lo que son capaces. Disfrutaron de un sonido de conjunto bastante compacto y como curiosidad decir que son los únicos de la noche que cuentan en sus filas con cuatro integrantes (el resto eran tríos a excepción del saxo y clarinete de Orthodox). En resumen, un puro viaje a través del desierto puestos hasta arriba de peyote y con los instrumentos a punto de ebullición...

CUZO


Para mí una de las sorpresas de la noche. Derrocharon energía y saber hacer en el escenario con una compenetración digna de elogio. Sonidos cósmicos, krautrock, rock de los 70 y un sonido como un martillo neumático a todo trapo... El sonidillo del Korg alucinante; una pasada ver a Jaume manejar los cables de operador y los botones del sintetizador. Pep Caravante una máquina a la batería, con una fuerza y una pegada brutal perfectamente sincronizado con el bajo de Fermín en una base rítmica fenomenal. Había momentos de tanta saturación psicodélica que parecía imposible que sólo 3 personas produjesen tal maremagnum de sonido. Un 10 y espero verlos en la Caja Blanca con Damo Suzuki...

ORTHODOX



Se abre el telón y comienza la Raga. Una seriedad y compostura como mandan los cánones del Doom y una concentración de los músicos que nos indica que el ritual va a ser intenso...

Marco al contrabajo (alucinante) va marcando los pasos y el ritmo de la procesión; el público en silencio en la sala en perfecta comunión con los músicos. Un saxo y clarinete que parecen provenir de otro mundo, como si el mismísimo Coltrane en sus últimos años de experimentación se hubiese levantado de la tumba para dar un último show. Una batería marcando pasos de Semana Santa y experimentación pura a los platillos. Una guitarra solemne que nos transporta a otro mundo...

Lo que hacen estas tres máquinas no es música, es algo más. Ecos de Free Jazz, toques de flamenco, pasos de Semana Santa, la pureza del más genuino Doom... todavía tengo los vellos de punta al escuchar los toques de contrabajo y los recitados de Heritage.

Creo que si llegan a tocar Matse Avatar me desmayo allí mismo.

LYDIA LUNCH


Enmarcada dentro del más transgresor Spoken Word, Lunch nos dio un recital que parecía sacado de la cabeza de David Lynch. Personalmente lo que menos disfruté de la noche; tuvo sus momentos pero para mí no pudo igualar lo que vi anteriormente. Me habría gustado terminar la noche con más música aunque no le quito el mérito al espectáculo de la Dama Oscura del Punk.

A destacar algunos ambientes opresivos y de cabaret oscuro que daban auténtico miedo.

Como perlas de la noche me pillé una camiseta de Orthodox con el lema de Gran Poder y el "Come my fanatics..." de Electric Wizard a un precio inmejorable.

Espero que iniciativas como ésta se repitan y la gente se mueva de sus cómodos asientos de sus casas que luego se quejan de que Málaga no pasó las primeras rondas de la Capital Europea de la Cultura.

Y a los que todavía no tengan los discos originales de los grupos antes citados... NO SE A QUÉ ESTAN ESPERANDO.

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